OPINIÓN EXPRÉS

¡Que muerda... pero que muerda bien!

Luis Suárez ha prometido que no cometerá más errores, pero el Barça necesita su 'agresividad futbolística'

Luis Suárez, en un momento de su presentación

Luis Suárez, en un momento de su presentación / sport

Lluís Mascaró

Luis Suárez quiere olvidar su pasado polémico, su mordisco a Chiellini y la sanción de la FIFA. El delantero uruguayo se ha puesto en manos de especialistas para que traten su exceso de agresividad personal. Pero el Barça necesita su 'agresividad futbolística' para que forme el mejor tridente ofensivo del mundo junto a Messi y Neymar. ¡Que muerda... pero que muerda bien! Que no muerda a los rivales, sino que salga a comerse el campo, con esa competitividad y ese ansía de triunfo que le caracteriza. El Barça no necesita un 'niño bueno', sino la fuerza y el hambre de uno de los mejores goleadores del planeta.

Suárez sabe que ha venido al Barça para ganar títulos, justo lo que no ha conseguido hasta ahora en Europa. Suárez sabe que vestido de blaugrana tiene más opciones de conquistar la Bota de Oro, porque dispondrá de la colaboración de magos del balón como Messi, Neymar, Iniesta, Xavi o Rakitic, que le harán más fácil su trabajo de 'depredador' del área. El Barça necesita la versión más 'killer' de Suárez. La del delantero listo y batallador que se parte la cara para rematar un balón. La del futbolista agresivo y potente que supera a los marcadores por fuerza y voluntad. Nadie debe cambiar el estilo y la personalidad de Suárez porque entonces perderíamos a Suárez.

Lo que deben conseguir el Barça y los profesionales que asesoran al uruguayo es que reconduzca hacia el fútbol su exceso de agresividad. Que no se repitan, en definitiva, episodios como los mordiscos a los rivales que tantos disgustos le han provocado. Y para eso no hace firmar 'cláusulas anti-mordiscos', sino gestionar con acierto su 'problema'.