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La importancia de llamarse Piqué

Piqué, de vuelta

Piqué, de vuelta / AFP

lluís mascaró

El primer once del Barça 2016-17 fue una alineación de circunstancias, de la que no puede extraerse ninguna conclusión más allá de que Messi y Luis Suárez lo jugarán esta temporada absolutamente todo. Como es lógico. Incluidos los amistosos como el de ayer ante el Celtic. Con muchos suplentes (Masip, Martínez, Mathieu, Sergi Roberto, Denis Suárez, Arda Turan, Cámara y Munir) y con el único objetivo de empezar la preparación de una campaña que será tan larga como intensa, el equipo de Luis Enrique arrancó la puesta a punto sin muchas novedades. Como era de esperar. Y es que este Barça será una ‘repetición’ mejorada del que ganó el doblete. Con las incorporaciones, además de Denis Suárez, de Umtiti, Digne y André Gomes. Y a la espera de ese cuarto delantero que está condenado, quiera o no, a chupar mucho banquillo. ¿O alguien se cree que le quitará el puesto a alguno de los tres componentes de la MSN? El tridente tiene asegurados todos los minutos que quiera. Y no hay técnico (por muy asturiano que sea) capaz de sentar a ninguno de sus tres miembros. Algo muy parecido, salvando las distancias, con lo que pasará con la pareja de centrales, formada por Piqué y Mascherano.

Paula, una jovencita de apenas 14 años, está ‘enamorada’ de Piqué. Como la mayoría de adolescentes (y no tan adolescentes) que conozco. Pero el atractivo de Gerard va mucho más allá de lo físico. O debería ir. Piqué es uno de los mejores centrales de Europa. Y esta temporada, habiendo alcanzado su plena madurez personal, tiene la obligación moral de gestionar su rendimiento y olvidarse de los periscopes y otras zarandajas. Paula, que también es una gran cazadora de ‘pokémons’, confía plenamente en la personalidad de Piqué para revertir la situación. Y sabe, como sabemos todos, que un Piqué centrado y con ganas de fútbol es más titular que el mismísimo Messi. Pero debe querer ser titular. No por descarte, sino por decisión propia. Veremos hasta dónde está dispuesto a sacrificarse. Paula y muchos otros socios y aficionados esperan ver esta temporada su mejor versión. En el campo. No en las redes sociales.