No está todo perdido... pero casi

En una Liga de dos, seis puntos son demasiados

La Liga dio anoche un vuelco sorprendente. Y fatal para el Barça. La derrota, la primera de la temporada, del equipo blaugrana en Getafe pone el título en bandeja al Madrid. Así de claro. Ya sé que faltan muchos partidos (incluidos los dos enfrentamientos directos), pero el equipo de Mourinho se encontró ayer con 6 puntos a su favor que difícilmente dejará escapar.  El regalo que le hizo el Barça tiene demasiado valor para que el Madrid lo rechace. Los blancos están en racha (ayer golearon 4-1 al Atlético en el derbi) y son mucho más solidos que la pasada temporada. Además, la caverna mediática multiplicará la euforia con su campaña propagandística que ahora ya será imparable. No está todo perdido. Pero casi. Esto es una Liga de dos y ya se le ha dado demasiada ventaja al rival. ¿Irrecuperable? Eso me temo...

La falta de  lucidez fue fatal ante el Getafe

A    Guardiola le daba miedo el partido de anoche. Lo consideraba peligroso. Como los dos próximos, ante el Rayo y el Levante. No por la entidad de los rivales, sino por lo que podría suponer un tropiezo en cualquiera de estos tres encuentros. Perder puntos sería llegar al Bernabéu con una diferencia demasiado grande, que daría ventaja psicológica al Madrid. Y eso resultaría fatal. Por eso Pep estaba preocupado. Por eso y porque su equipo ya lleva semanas haciéndolo todo igual que antes pero a una velocidad menos. Dominio absoluto, pero sin la profundidad necesaria para hacer daño al rival. Una falta de ritmo que vulgariza al Barça. Como sucedió ayer en el Coliseum Alfonso Pérez. Ni el equipo ni el entrenador encontraron la solución para superar a un Getafe inofensivo pero muy ordenado. Una falta de lucidez que resultó decisiva.

'Mou' contagia   su prepotencia    a los aficionados

La pancarta que mostraba el Fondo Sur era un claro ejemplo de la `mourinhización¿ que sufre el madridismo: “Se busca rival digno para derbi decente. Razón aquí”. La prepotencia del técnico portugués se ha propagado como un virus letal. Y el contagio afecta ya a todos los aficionados. La falta de respeto hacia el rival, una tónica habitual en la carrera de Mourinho, se puso anoche de manifiesto en el Bernabéu. Es verdad que la última vez que el Atlético ganó un clásico aún se pagaban las entradas con pesetas y el crack rojiblanco era Hasselbaink. Pero 12 años después, los colchoneros no merecen ser insultados de esta forma tan impune. Que no se preocupen. Si ellos no son un `rival digno¿ para el Madrid, el Barça sí lo es. Debemos seguir confiando en el equipo de Guardiola. Ahora se enfrenta a su reto más complejo.