Teixeira Vitienes, hermanos bajo sospecha

Apodados los ‘hermanos Calamidad’, Fernando y José Antonio Teixeira Vitienes han entrado en el olimpo mediático del fútbol. No por sus habilidades con el pito en la boca, todo lo contrario. Las actuaciones de estos dos colegiados cántabros han incendiado la Liga por sus desastrosos arbitrajes. Tanto que es prácticamente inevitable asociar la palabra escándalo a sus actuaciones. Cada vez son más numerosas las voces que hablan de un comportamiento sospechoso de los árbitros de mayor confianza de Victoriano Sánchez Arminio, esa figura extraña y siniestra que dirige el sector arbitral al más puro estilo de un señor feudal.

Los Teixeira Vitienes, que tienen el honor de ser los únicos hermanos que han arbitrado juntos  en Primera División en toda la historia del fútbol español, parecen empeñados en generar polémica, hasta el punto de que es difícil encontrar un equipo de la Liga que no les tema. Es más, hay quien se pregunta en el propio estamento arbitral  cómo es posible que con un nivel tan bajo hayan alcanzado la máxima categoría. Los que les conocen bien señalan que el presidente del Comité Técnico de Arbitros, cántabro como ellos, ha sabido corresponderles por su ‘colaboración’ cuando colocó a su mirlo blanco en el Colegio Cántabro de Árbitros. Desde entonces, su relación ha sido muy estrecha y la carrera de los ‘hermanos Calamidad’ altamente fructífera. 

Fernando, con 42 años, es el menor de los dos pero fue el primero en llegar a la máxima categoría –hace once años– y porta la escarapela internacional desde hace cuatro. La que lió el pasado fin de semana en el Almería-Atlético es una más de las muchas trastadas que ha protagonizado en un terreno de juego. Fue capaz de tragarse como si nada tres penalties clarísimos y en cambio pitó uno que no fue y que supuso la injusta expulsión de Aranzubia (error que tuvo que subsanar Competición). Esta misma temporada, y por poner un par de ejemplos, birló dos penaltis a Neymar ante el Valladolid y dio validez a un gol en fuera de juego de Cristiano en Mestalla. Su hermano José Antonio, que lleva cuatro años en Primera, fue más ‘ecuánime’ en el Sánchez Pizjuán al encabritar de igual manera a los dos contendientes: dio validez a un gol en fuera de juego de Alexis y no señaló un penalti de libro cometido sobre Messi. A lo largo de este campeonato también ha ido dejando huella, como cuando anuló un gol absolutamente legal a Neymar en campo del Valencia o cuando pitó tres penaltis, todos inexistentes, en la visita del Sevilla al Bernabéu.

Pero en su historial encontramos otras hazañas de los hermanos Teixeira: en 2012, Fernando no se atrevió a denunciar el acoso al que le sometió José Mourinho en el parking del Camp Nou y, tiempo atrás, en 2004, no tuvo reparos en retrasar casi una hora el derbi sevillano porque no le dio la gana de que el Betis vistiese de verdiblanco. 

De todas estas y, de otras tantas que sería interminable e imposible recordar, han salido indemnes los dos hermanos cántabros. Otros, por menos, acabaron en la famosa nevera. En cambio, Fernando y José Antonio siguen disfrutando del calor que les proporciona vivir bajo las alas protectoras de Sánchez Arminio.