La nueva fiscalidad dispararía las cifras

Renovación multimillonaria en el Madrid

El Real Madrid quiere ampliar el contrato del delantero, pero las cifras que se barajan son astronómicas

Redacción

Los cambios introducidos en la normativa fiscal española suponen un serio inconveniente para el Real Madrid en su intento de prolongar el contrato de Cristiano Ronaldo. El club blanco ha dado los primeros pasos para la renovación del delantero portugués y desde la cúpula madridista se ha tanteado ya la predisposición del jugador a seguir vistiendo de blanco, pero la nueva fiscalidad representa un problema importante para las arcas del club porque las cifras se disparan.

Al margen de la polémica que envuelve constantemente al jugador por su particular forma de comportarse, el Real Madrid está firmemente decidido a proponer a Cristiano Ronaldo una ampliación del contrato. El club blanco está encantado con su jugador más mediático y determinante y quiere proponerle una prórroga por varias temporadas con el objetivo de que el portugués sea el emblema del club en los mejores años de su carrera deportiva. Pero los números que se vislumbran en la posible operación plantean serios quebraderos de cabeza en las altas instancias del Santiago Bernabéu.

El actual contrato de Cristiano Ronaldo, firmado cuando regía en España la llamada `ley Beckham¿ por la cual los futbolistas extranjeros se beneficiaban de ventajas fiscales a la hora de tributar, supone una fiscalidad del 24 por ciento. Ahora, con la nueva normativa, el porcentaje se dispararía hasta el 52 por ciento. Haciendo números, y según informaba `elEconomista¿, en caso de que Cristiano Ronaldo y Real Madrid suscribieran un nuevo contrato, el club debería desembolsar unos 22,5 millones de euros por año si la ficha del futbolista, como se ha especulado, fuera de quince millones anuales, una cantidad considerable pero acorde con el caché de Cristiano.

En caso de que el Real Madrid quisiera asegurarse la continuidad del delantero portugués los próximos cinco años, como sería el deseo inicial de Florentino Pérez, las arcas del Real Madrid deberían destinar la friolera de 112,5 millones de euros tan solo para cubrir el salario del jugador, una cifra astronómica para los tiempos que corren.

En el Real Madrid no se dan por vencidos y pese a la dificultad que entrañaría el nuevo contrato del jugador, se trabaja también sobre fórmulas imaginativas que sirvieran para suavizar el tremendo impacto que la renovación supondría para la tesorería del club blanco. De hecho, los primeros contactos para la ampliación del contrato de Cristiano ya se han producido y el representante del jugador, Jorge Mendes, ya se ha visto con José Ángel Sánchez, director general ejecutivo del Real Madrid.

En principio, el tiempo no supone ningún problema porque el actual contrato del futbolista no concluye hasta junio de 2015, pero el Real Madrid quiere acelerar la operación porque Cristiano ha estado y seguirá estando en la lista de objetivos de los clubs más poderosos. Mejor tenerle bien atado.