El Madrid renuncia a Neymar

El Real Madrid ha perdido la batalla por Neymar. La derrota ha sido absoluta, sin paliativos. Todas las triquiñuelas de Florentino Pérez para robar, por la espalda, a la estrella emergente del Santos, han fracasado. El 'Mohicano', que en su momento fue anunciado a bombo y platillo, no aterrizó en Barajas el último verano, ni tampoco en enero, y no lo hará tras los Juegos Olímpicos de Londres... ni nunca. La única camiseta blanca que la 'Joya' vestirá a corto y medio plazo es la del 'Peixe'. El Barça, con Sandro Rosell a la cabeza, ha ganado la batalla en los despachos.

La 'caverna' hace meses que no habla del 'Gallo', apelativo que se inventaron el último verano Florentino y Mourinho. Las interesadas filtraciones se acabaron en el momento en que el Barça llegó al acuerdo con el Santos que esperaría al futbolista tras el Mundial 2014 de Brasil, cuando éste finalice su actual contrato.

Con la complicidad del silencio de la prensa afín, la directiva merengue ha tenido que digerir su ridículo. Y es que el Madrid llegó a mandar a Sao Paulo al director del departamento médico y al del jurídico para cerrar un traspaso que nunca se realizó.

Conscientes de que no hay ninguna brecha para fichar al 'Mohicano', en el Bernabéu han buscado un premio de consolación, pero no hay otra joya en Brasil como el santista. El segundo plato elegido es Lucas, de 19 años, un centrocampista creativo, con gol, que está apareciendo con fuerza en el Sao Paulo. Las comparaciones con Neymar son imposibles, por mucho que sean de la misma generación y que hayan labrado una gran amistad, alimentada principalmente por el representante de ambos, Wagner Ribeiro, que los 'vende' como si casi fuesen gemelos.

Es nuevamente el ínclito agente, aliado de Florentino en Brasil, quien está detrás de la operación. Ribeiro, a quien el Madrid le prometió una pornográfica comisión si cerraba el traspaso de Neymar, fue el eje sobre el que pivotó la estrategia merengue para hacerse con la estrella santista. El representante intentó convencer a Neymar padre e hijo que lo mejor era que permitiesen que el Madrid pagase su cláusula de rescisión a espaldas del Santos. El 'Mohicano' se negó a entrar en esa estrategia de confrontación que Florentino ha utilizado para fichar a todos sus galácticos. Neymar no quiso salir por la puerta de atrás de la Vila Belmiro, como sí hizo en su día Robinho, siguiendo las indicaciones de Ribeiro, que en la época era su agente.

Ahora Ribeiro quiere colocar a Lucas en el Madrid. Y Florentino parece que ha mordido el anzuelo, pero pagará el gusto y las ganas por él.

En el último mercado invernal, el Sao Paulo, que no es un negociador precisamente fácil, ya renunció a una oferta de 25 millones de euros del Inter. La Roma de Luis Enrique también se interesó y el Chelsea estaría al acecho. El futbolista está blindado. Su contrato expira el 31 de diciembre de 2015 y su cláusula asciende a 80 millones de euros, la tercera más alta del fútbol brasileño tras la de Ronaldinho Gaucho y Neymar.

Hay todos los ingredientes para que Ribeiro pueda empezar su particular subasta. El Inter, que tiene que reconstruir su equipo, pujará fuerte. El Chelsea cuenta como aliado al israeí Pini Zahavi, socio de Ribeiro en Inglaterra. Y el Madrid querrá tapar el fracaso de Neymar con otro crack en potencia.