El Levante ya tiene a su 'Edgar Davids'

El pasado 27 de setiembre la vida de Ángel Trujillo cambió para siempre. Y es que en el partido contra el Getafe su ojo derecho sufrió siete roturas en la retina que le impidió ver durante un rato y pidió el cambio. Algunos meses y decenas de pruebas después, Trujillo deberá utilizar hasta final de temporada unas gafas especiales para evitar golpes “me voy a tener que poner  gafas hasta final de la temporada para evitar golpes directos en el ojo. No se sabe si podría pasar algo o no, pero esto es un caso único, no ha pasado nunca y no hay referencias como en otras lesiones” explicó a El Espectador. 

Y es que el caso de Trujillo, a pesar de no ser la primera vez que se ven gafas en los terrenos de fútbol, sí que es el primero que se ve con este tipo de dolencia. El jugador de Levante ha acortado los plazos y se siente con fuerza para reanudar la temporada con garantías (jugó el pasado sábado frente al Atlético de Madrid).

A pesar de la magnitud de la lesión, el futbolista nunca se había lesionado y espera devolver al Levante el esfuerzo para ficharle (pagó cerca de un millón de euros): “yo nunca me había lesionado y lo he pasado mal. Venir aquí, habiendo pagado el club un traspaso alto por mí siendo defensa. Estaba ilusionado, todo me iba bien y de golpe y porrazo te ves en una cama tirado. Se pasa mal pero espero devolver la confianza que el club puso en mí cuando me fichó” explicó el defensa del Levante.