El portero está muy preocupado por su situación

Casillas medita marcharse

La suplencia del meta ante el Málaga traerá cola. Casillas tiene claro que no seguirá junto a Mourinho

A. Alcázar

La decisión de sentar a Iker Casillas ante el Málaga estaba muy meditada. Mourinho sabía que iba a traer graves consecuencias dentro y fuera del vestuario y una de ellas sería el divorcio definitivo con el portero. El capitán madridista no ha exteriorizado su enfado para no avivar la polémica, pero ya ha tomado una decisión. Sabe que está en una guerra contra su entrenador y no piensa seguir en el Madrid si Mourinho sigue al frente del equipo. Medita marcharse para que no destroce su carrera.