El Getafe vuelve a Primera

No habrá derbi canario en Primera. El Getafe arrebató el sueño del ascenso al Tenerife, que fue incapaz de mantener la ventaja de la ida (1-0) al caer por 3-1 en el Coliseum en un primer tiempo brillante del equipo de Pepe Bordalás.

No pudieron comenzar mejor las cosas para el conjunto azulón. Sólo necesitó rematar dos veces sobre la portería del venezolano Dani Hernández para encontrarse en una situación ilídica para afrontar el resto del encuentro. Faurlin, tras un rechace a la salida de un córner igualaba la eliminatoria cuando sólo habían transcurrido 8 minutos y justo después de que el árbitro se tragara un claro penalty de Camille sobre Jorge Molina. Casi sin tiempo para encajar el primer golpe, cuatro minutos después Dani Pacheco recogió un baló suelto para colocar en el marcador un 2-0 que abría el cielo a la afición azulona. 

Pero si algo tienen estos play off de ascenso es que la suerte cambia de lado en apenas segundos.  En la primera llegada con cierto peligro, el Tenerife acortaba distancias y volvía a decantar la eliminatoria a su favor cuando el hondureño Lozano culminaba en gol una gran asistencia del japonés Gaku Shibasaki. 

No se vino abajo el Getafe. Tocando y tocando para superar el sistema de contención que había dispuesto Pep Lluís Martí, el equipo madrileño siguió encontrando huecos por donde hacer daño y después de que Chuli pusiera a prueba los reflejos de Dani Hernández, volvió a abrir brecha en un fallo defensivo de su rival que Dani Pacheco (37’), otra vez, no desaprovechó para que se llegara al descanso con el Getafe a 45 minutos de Primera División. 

El Tenerife, que esta vez sí notó el cansancio acumulado –Martí repitió once por tercera vez consecutiva– nunca pudo hacer lo que mejor sabe hacer. que es controlar el juego, presionar arriba y cerrar todos los caminos hacia su portería. Sabía, eso sí, que si en el segundo tiempo lograba hacer otro gol volvería a tener el ascenso en sus manos.

Con todo perdido, el Tenerife aspostó a la velocidad de Amath para superar la débil defensa azulona, donde el ‘Cata’ Díaz fue un lastre peligroso. Los nervios se apoderaron de los jugadores de Bordalás, incapaces de encontrar el gol que sentenciara la final. El Tenerife amagó y amagó con dar un golpe letal a un Getafe que entró en modo pánico. Los últimos minutos resultaron una agonía para la afición azulona. El acoso blanquiazul no tenía fin. Amath y Aarón tuvieron el gol del ascenso antes de un descuento interminable. El balón sólo rondó el área de Guaita en un final desesperante para los blanquiazules, que lo intentaron todo en busca de un gol histórico que nunca llegó.