ESPAÑOLES EN LOS JUEGOS OLÍMPICOS DE LONDRES 2012

Mireia Belmonte: "Me dicen que no tengo límites, pero es difícil de creer"

Ha entrenado tanto que ahora ya está algo impaciente para que lleguen los Juegos. Ha dedicado muchísimos metros en el agua a prepararlos y a intentar que todo salga a pedir de boca... se siente a punto y con ganas. El crono le hace ser optimista así que espera lo mejor de Londres

Tras debutar en Pekín como olímpica, Mireia Belmonte afronta los de Londres con más experiencia y madurez. Es su momento

Tras debutar en Pekín como olímpica, Mireia Belmonte afronta los de Londres con más experiencia y madurez. Es su momento / JOSEP MARIA AROLAS

Àngels Fàbregues

Fred, su entrenador, no le da tregua. La obliga a entrenar y entrenar. Sabe que solo con trabajo llegarán los éxitos y ella lo ha captado y lo acepta. “Estoy petadísima”, dice Mireia Belmonte cuando se acerca a nosotros una hora más tarde de la pactada: “Lo siento”. Lo dicho, Fred retrasó el entreno, pero no le perdona ni un minuto, ni una brazada de las que programó en su libreta.

Los de Londres serán sus segundos Juegos Olímpicos, una cita que ya espera con impaciencia: “Se acercan muy rápidamente, pero esto es bueno porque estamos entrenando mucho tiempo y tiene que llegar, sino sería un poco chungo”, comenta mientras bebe un poco de agua para hidratarse.

A Mireia se le ha acumulado la faena en la cita olímpica de este verano, nadará nada menos que seis pruebas ¿solo descarta el 200 libre¿ pero lo asume con naturalidad. Está acostumbrada a desdoblarse en las competiciones así que para ella no será nada nuevo. “Todavía no tengo nervios. Tengo mucha fuerza para entrenar más duro y estoy muy motivada”, señaló una Belmonte mucho más madura que la que viajó a Pekín, con tan solo 17 años.

En Londres reconoce que vivirá los Juegos “mucho más tranquila porque estoy más acostumbrada a competir a alto nivel”. Sin embargo, sabe perfectamente que los afrontará “con nervios porque tengo muchas más expectativas y tengo algo más de responsabilidad. Pero como ya no voy tan de novata, conozco el ambiente y todo lo que supone, no me costará tanto”.

Le da miedo hablar de objetivos. En esto también ha madurado. Desde muy jovencita se le han exigido resultados pro es consciente de que unos Juegos son palabras mayores: “Es difícil saber cuáles son mis expectativas porque todavía queda mucha gente por nadar y no sé en qué posición estoy en el ranking. Creo que se tiene que ir paso a paso. Nadar por la mañana, por la tarde, hacer semifinales y finales. Nadar la final y hacer una mejor marca estaría muy bien. Cumpliría el objetivo. Subir al podio estaría muy bien pero es muy difícil. Todo el mundo se prepara mucho”, señala prudente.

La nadadora del CN Sabadell no sabe hasta dónde puede llegar. Su entrenador le ayuda a saberlo: “Fred me ha dicho que no tengo límites. Que puedo hacer cualquier cosa. Que un entrenador te diga que no tienes límites suena muy grande. Es difícil de creer”, pero se apresura a señalar que “yo tengo confianza”. Es una buena señal ver a una Mireia tan segura, ese plus de confianza son algunas décimas de segundo menos en la piscina.