JUEGOS OLÍMPICOS RÍO 2016

Juan Antonio Samaranch: "Dar los Juegos a Río no fue un error"

Mamó los Juegos desde niño.  Se emocionó con Cacho, Coe, con la final de waterpolo en BCN’92,  y es miembro del CIO en un momento de gran confusión

Juan Antonio Samaranch está metido a tope en el Olympic Channel Services S.L. España (2015), un proyecto de un billón de euros en 10 años

Juan Antonio Samaranch está metido a tope en el Olympic Channel Services S.L. España (2015), un proyecto de un billón de euros en 10 años / sport

Carlos R. Galindo

Juan Antonio Samaranch, miembro del Comité Ejecutivo del Comité Internacional Olímpico, es miembro de las comisiones de Márketing, Comunicación, Solidaridad Olímpica y Canal Olímpico S.A. en Suiza (Olympic Channel Services S.A), además de presidente de Canal Olímpico S.L. España. También es delegado en Europa de los Derechos Televisivos. Toca preguntarle a él... Es una de las personas que más saben del movimiento olímpico en el mundo. Lo mamó desde niño...

Menudo panorama…

¿Usted cree? A mí me parece que el panorama no es preocupante. Es lo que suele pasar cuando estamos a escasas semanas del inicio de los Juegos. Eso es todo... 

Permítame: el dopaje, Rusia, Kenia, Sochi, la inseguridad en Río, la quiebra económica de la ciudad tapada por el gobierno brasileño, el virus del mosquito Zika, deportistas que se ‘borran’ de los Juegos… ¿Me dice que no pasa nada?

Son muchas cuestiones, en efecto, pero, contésteme a esta pregunta, ¿usted recuerda alguna edición olímpica que, a falta de menos dos meses, no se haya visto sacudida por el ruido mediático? Piense en Barcelona, Atenas… Supongo que es algo inherente a la importancia del propio evento. Cualquier cosa que ocurra es noticia en todo el mundo. Esa es la magia de los Juegos… y el precio que hay que pagar.

Pero no me negará…

Sí, es verdad (salta como una centella). Pero, mire, los Juegos ya están a la vuelta de la esquina y la tensión mediática es brutal. Un consejo, no se preocupe, todo saldrá bien y los Juegos serán un éxito. Ya verá… 

Vayamos al dopaje.

Sea…. Estamos a punto de alcanzar un grado de ‘limpieza’ como nunca antes habíamos tenido. No es verdad que haya más dopaje que antes; simplemente, la tecnología para investigar se ha sofisticado y, por eso, se detectan más casos. Incluso se revisan los análisis de hace unos años. Quien tenga la intención de recurrir a prácticas ilícitas, ahora sabe que será ‘cazado’. 

¿Se equivoca la IAAF y el CIO con Rusia al extender la sombra de dopaje sobre todos los atletas de aquel país?

En Rusia hubo tal grado de corrupción e ineficacia en el sistema de control que ya no se podía determinar qué atleta estaba ‘limpio’ y quién era un tramposo. Moverse en ese terreno era muy difícil porque el proceso no tenía ni garantías ni credibilidad. Incluso pesaba la sombra de dopaje sobre aquellos atletas que ya habían sido testados. ¿Lo habían sido en realidad?, ¿habían sido rigurosos los análisis …?

Pero meter en el mismo saco a culpables e inocentes…, ¿no es eso un ataque a los derechos fundamentales de la persona?

El proceso no fue fácil, pero le garantizo que la esencia misma del CIO es la de preservar a los deportistas de todo el mundo y, en especial, a los que son íntegros. Nuestra apuesta es y siempre ha sido el atleta. <strong>No ha sido fácil llegar a este punto, pero verá como en Río están los mejores deportistas.</strong>

¿Así pues, veremos saltar a Yelena Isinbayeva?

Me encantaría… Isinbayeva es alguien muy especial. Se trata de una de las mejores deportistas de todos los tiempos y uno de los grandes iconos de los Juegos. Expreso una opinión personal pero, sí, confío en que participe en los Juegos.

La pertiguista fue amiga de su padre y es buque insignia del atletismo y del CIO

En efecto. Hubo una relación muy estrecha entre mi padre y ella. Ya le dije, Yelena es alguien muy especial. Además, sabemos que ha entrenado fuera de Rusia, que ha pasado todos los controles antidopaje de manera satisfactoria… No hay razón para creer que no estará en Río.

¿Tiene sentido que se cuestione la presencia de la doble campeona olímpica de salto con pértiga y no la del velocista estadounidense Justin Gatlin, éste sí, dos veces sancionado por dopaje?

Si me pregunta si hay una vara de medir distinta le diré que no. Hemos aprendido mucho en los últimos años y nuestra lucha es por la integridad del deporte. Y me refiero a todo el deporte. No hay distingos.

¿Qué me dice del Zika?

Estoy absolutamente tranquilo en esa cuestión. Entiendo que cualquier aspecto relacionado con la salud provoca una enorme preocupación pero el CIO, como no podía ser de otra manera, se ha puesto bajo la supervisión de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Y si la OMS dice que el riesgo es mínimo, habrá que creérselo. Sabemos, porque así nos lo han trasladado sus expertos, que la amenaza del virus del Zika será prácticamente inexistente en los meses invernales en esa parte del mundo, es decir, en julio, agosto y septiembre. 

¿Pero hay deportistas como el golfista norirlandés Rory Mcilroy que ya han anunciado que no viajarán a Río por temor al Zika

Lamento lo de McIlroy. Me hubiera encantado verle jugar. Siento su ausencia porque es un gran deportista y, además, soy muy aficionado al golf. Siempre que puedo juego unos hoyos…

Desde luego, McIlroy  le hace un flaco favor a su deporte, que acaba de entrar en el programa olímpico. 

Es una decisión personal en la que no entraré. Pero tampoco hay que ser alarmistas; el golf necesita un período de adaptación, tal y como ocurrió con el tenis, que empezó con cierta tibieza hasta consolidarse plenamente. Y ya ve, ahora todos quieren ir a Río, Djokovic, Federer, Serena, Nadal... El golf ha de recorrer su camino; no puede pasar de 0 a 100 en un segundo. 

Visto lo visto, ¿fue un error la elección de Río de Janeiro?

Rotundamente, no. Y recuerde que yo defendí la candidatura de Madrid que aspiraba a esos Juegos. 

Pero el país está atravesando una crisis brutal.

Cuando el CIO optó por Río, asumió  unos riesgos. ¿Hubiera sido más seguro llevarlos a Madrid…? ¡Quizá sí! Pero el olimpismo no pertenece solo a unos pocos países. Según ese criterio,  ¿se lo otorgamos siempre a los mismos? Organizar unos Juegos ayuda al desarrollo de las sedes, las pone en el mapa internacional, crecen y se afianzan, se construyen infraestructuras que son absolutamente necesarias… Barcelona es el ejemplo. Desde el CIO ya nos preocupamos de que los presupuestos sean realistas, que las instalaciones formen parte del legado y no se conviertan en una rémora, que se cuide el aspecto medioambiental… Esa es nuestra misión. Además, recuerde, cuando se eligió a Río (2-10-2009, en Copenhague), Brasil era una economía emergente de primer nivel que rivalizaba con las grandes potencias…

Sí, pero estaba en liza con la Chicago de Obama, la siempre sólida Tokio, incluso Madrid… No hubiera sido más fácil…

(Ataja) Llevar los Juegos a Sudamérica ha sido un gran acierto. Verá como, al final, será beneficioso.

¿Le preocupa el gigantismo de los Juegos?

No veo por que se ha de cuestionar su dimensión. Me gustaría que no  crecieran más pero creo que el formato actual es el adecuado. Habrá que intentar abaratar costes para evitar el endeudamiento de las ciudades.  En ello estamos…

Su padre estaba muy preocupado porque los Juegos se vieran en abierto…

Pero el mundo ha cambiado y es irreconocible. Antes vivíamos en lo analógico y ahora estamos en lo digital. Los jóvenes dejan de ver la televisión convencional y siguen los nuevos formatos. Aún así, tenga en cuenta que los derechos de TV para Europa han sido concedidos a Discovery-Eurosport (2018-2024)  que está obligada por contrato a dar 200 horas en abierto. Y 200 horas son muchas horas…