Leyendas de los Juegos Olímpicos: Johnny Weissmüller

Hjo de súbditos germanoparlantes, Johnny Weissmüller nació en Timisoara, actual Rumanía, el 2 de junio de 1904. Y ya desde muy joven, Johnny se mostró, como su hermano, un buen nadador. Las playas del lago Míchigan se convirtieron en su lugar favorito en el verano, y gracias a sus entrenamientos prematuros, a los doce años ingresó en un equipo de natación de renombre.

Pero Weissmüller tuvo que compenetrar su `hobbie¿ con su trabajo, que era el de botones en un Hotel de Chicago. De mientras, entrenaba para los Juegos Olímpicos. Debutó como amateur en 1921, ganando su primera competición en 50 yardas estilo libre.

Pese a haber nacido fuera de los Estados Unidos, el nadador consiguió competir en el equipo norteamericano, con quien da el salto a la fama. En el 1922 rompió el récord mundial de Duke Kahanamoku en los 100 metros estilo libre, siendo la primera vez que alguien baja del minuto. Solo dos años después, ganó la medalla olímpica en los Juegos de París en la misma distancia. Además, también logró el oro en los 400 metros libres y en relevos 4x200.

Por si fuera poco, como miembro del equipo nacional de waterpolo también ganó un bronce, y en 1928, en Amsterdam, sumó otras dos medallas de oro.

En total, durante toda su carrera, consiguió cinco medallas de oro olímpicas, una de bronce, ganó 52 campeonatos nacionales de los Estados Unidos y estableció 67 récords mundiales. Johnny Weissmüller nunca perdió una competición y se retiró de su carrera en la natación amateur invicto.

Pero Johnny Weismüller no solo destacó en el deporte, ya que su carrera cinematográfica fue tan o más exitosa que la deportiva. Su andadura en el cine empezó cuando aceptó el papel de Tarzán en la película Tarzán de los monos, dirigida por Woody Strong Van Dyke. El éxito fue tan mayúsculo que el `actor¿ representó hasta doce veces a Tarzán, de modo que se convirtió en el más conocido de todos los actores que interpretaron el personaje.

Una vez aparcado el cine, el rumano vivió en Florida hasta finales de 1973, cuando decidió irse a Las Vegas, donde trabajó durante un tiempo de relaciones públicas de un hotel. Poco más tarde, descubrió que tenía problemas de corazón cuando se le efectuaron unas pruebas por una fractura de cadera.

Ya en estado crítico, se estableció en México, donde incluso fue capaz de rodar su última película antes de morir, en 1984, por culpa de un edema pulmonar.

Johnny Weissmüller tiene una estrella el Paseo de la Fama de Hollywood, en el 6541 de Hollywood Boulevard en Hollywood, California.