MI VERDAD

El Ronaldo de Portugal no es el Ronaldo del Madrid

Josep Maria Casanovas

Alemania tiene el mérito de que sabe ganar sin jugar bien. Es la eficacia por encima del buen juego. Van a lo práctico, asumen pocos riesgos y les basta un gol para confirmar su condición de favoritos. En la primera fase de la Eurocopa lo que vale es llegar a cuartos de final y la forma es lo de menos. Un gol de cabeza de Mario Gómez fue suficiente anoche para que los alemanes derrotaran a Portugal, que cometió el grave error de jugar al empate a cero. Pagaron su conformismo muy caro, solo fueron al ataque cuando tuvieron el marcador en contra y la verdad es que tuvieron ocasiones, dos postes concretamente, para conseguir algo más. Pero se despertaron tarde y Ronaldo tuvo muy poco protagonismo. El Cristiano de la selección no tiene nada que ver con el Cristiano del Madrid, donde todos juegan por y para él. Le pasa lo mismo que le pasaba a Messi con Argentina. No explotan su potencial, no aprovechan su velocidad y ni siquiera tuvo ocasión de chutar una sola falta. La lectura positiva de la jornada de ayer para el fútbol español es que La Roja, si hace su juego, está por encima, tiene que llegar lejos. Esto solo ha hecho que comenzar, pero de momento hay más emoción que buen fútbol.