El fútbol se contagia de la crisis de valores

FLORENTINO Y BLATTER: TAL PARA CUAL. Vivimos en un país donde las malas noticias ganan por goleada a las buenas. Cada día salta un caso nuevo de corrupción, la lista de imputados por la justicia se multiplica y los ciudadanos de a pie, con toda la razón, han perdido la fe en los políticos. Vamos directos a un cambio de poderes, a una revolución de la calle. El mundo del fútbol no está al margen de esta crisis de valores. Hay dirigentes como Blatter que se agarran a la poltrona para que nadie les quite unos privilegios que parecen vitalicios. Es un presidente caduco y poco transparente. Si algún día se publica una investigación a fondo de la FIFA, el escándalo será mayúsculo. Allí solo caben fieles que siguen la voz de su amo. A Blatter le pesan los años y le traiciona el sentido común. El mismo hombre que un día criticó a Cristiano Ronaldo, reconoce ahora que Messi no tuvo que ganar el Balón de Oro del Mundial. Él mismo se crea los problemas. En la LFP, la Liga de Fútbol Profesional, también pasan cosas que algún día explotarán. El presidente, Javier Tebas, no tiene la casa limpia y arrastra un pasado de juzgado de guardia. Para conservar el cargo, por cierto muy bien pagado, se ha vendido al poder blanco y la LFP se ha convertido en la ‘Liga Florentino Pérez’. En la gala de entrega de premios se ocultaron las votaciones y aquello se convirtió en un homenaje a los jugadores del Madrid aunque fuera el Atlético quien ganara el título. Un detalle revelador: Keylor Navas fue elegido mejor portero por encima de Courtois. Una vergüenza.

MALA SEÑAL. Algo no funciona cuando se habla más de los dirigentes que de los futbolistas. También es censurable que para desviar la atención pública de los escándalos políticos el gobierno persiga fiscalmente a los cracks para demostrar que Hacienda somos todos. En el Barça los problemas con Hacienda están a la orden del día, ya que el ‘caso Neymar’ sigue vivo en los tribunales de Madrid aunque Jordi Casas retirara la denuncia. Se habla más de la absolución de Laporta que del próximo partido de Liga contra el Celta. Y esto va a continuar. Hoy el expresidente dará su versión de lo sucedido en los tribunales y mañana se reúne la Junta Directiva para discutir si recurre la sentencia o da carpetazo al caso. Cuando los futbolistas son menos protagonistas que los directivos, mala señal en Can Barça.