Florentino está atrapado y con una plantilla quemada

SE REPITE LA HISTORIA. El Barça fue la primera víctima de una FIFA corrupta y rencorosa. La sanción de un año sin poder fichar fue un castigo injusto y desproporcionado. El club que mejor trata la cantera no tuvo ayuda de la Federación Española ni de la Liga Profesional. Solo buenas palabras que se llevó el viento. En el Real Madrid hasta celebraron la sanción pensando que les podía beneficiar. Ingenuos y tontos. Con sanción y todo el Barça ha ganado cinco títulos dejando a los blancos en la miseria deportiva. Un año después, cuando el Barça ha cumplido el castigo, la Comisión Disciplinaria de la FIFA comunica a Madrid y Atlético una sanción idéntica a la que cayó sobre el Camp Nou. Por mucho que se quejen, aunque presenten mil recursos, aunque lleguen al TAS, están condenados. Llegados a este punto, nos preguntamos: ¿Solo los clubs españoles cometen errores en la contratación de jóvenes futbolistas? Ha llegado el momento que Villar, como presidente de la Española y vicepresidente de FIFA, dé la cara, no se puede esconder más. Esto parece una persecución a los clubs punteros de nuestro fútbol. Ahora sabrá Florentino lo que es beberse un trago de cicuta envenenada por la FIFA. Veremos si consigue una medida cautelar que le permita retrasar la sanción y fichar el próximo verano como sucedió con el Barça. No lo tendrá fácil.

ATRAPADOS Y SIN SALIDA. Con una FIFA descabezada y abocada a una lucha fratricida de cara a las próximas elecciones, los clubs madrileños reciben un palo cuando menos se lo esperaban. Había rumores desde hace tiempo que estaban siendo investigados, pero lo que nadie imaginaba es que a un mes de las elecciones, con un vacío de poder tremendo, el caso se sentenciara. Florentino está atrapado, sin poder llevar adelante sus planes, con una plantilla quemada y enfrentada. Ahora puede fichar, pero en el mercado de invierno no hay oportunidades para renovar la plantilla como desea. Igual se tiene que comer a Cristiano con patatas, despedirse de contratar a De Gea y sin posibilidades de convencer a Lewandonski.

Para el Barça fue un problema que no acabó en drama. Para el Madrid es un golpe tremendo que puede hipotecar su futuro. Después del terrible error que les costó la eliminación de la Copa, este otro fallo en los despachos deja al Madrid al borde del ataque de nervios. Se reían de la sanción al Barça y ahora la sufren en sus propias carnes.