ESTO ES LO QUE HAY

Sobreviviendo sin Messi

Suárez dedicó su gol a Messi

Suárez dedicó su gol a Messi / sport

Joan Mª Batlle

Sin alma pero con corazón. El primer partido sin Messi ha confirmado que el Barça tendrá que hacer frente a muchas dificultades en los próximos dos meses, muchísimas más todavía después de confirmarse que Iniesta estará cuatro semanas de baja. Pero eso será a partir de mañana y para adelantarse a los acontecimientos primero se ha de hacer un diagnóstico claro de lo que sucedió ayer. Vaya por delante que no se jugó bien, cualquier otra lectura sería engañarse. No se jugó bien en ninguna zona del campo y por eso el equipo tuvo que tirar de fe y coraje. En defensa no se puede seguir así. Se encajó otro gol de juveniles y esta vez no por culpa exclusiva de Ter Stegen. Alves y Piqué están desconocidos, tampoco Mascherano cierra como en él era habitual y Mathieu está a años luz de Jordi Alba, como pudo comprobarse en cuanto este salió. El centro del campo carbura a menos revoluciones y arriba la baja de Messi no tiene solución. En realidad, no solo arriba, en la ejecución, sino también en la media punta, en la elaboración. Leo es el alma de este equipo, así que sin alma no queda más remedio que ponerle corazón. Afortunadamente, este equipo tiene corazón, muchísimo corazón.

De hecho, la remontada épica de ayer ante el Bayer Leverkusen es un presagio de lo que le espera al Barça en las próximas siete u ocho semanas. En realidad, el equipo está obligado a aprender a sobrevivir sin Messi. Sí, sí, a sobrevivir porque esto puede convertirse en una auténtico “tour de force”. De entrada, Luis Enrique no podrá hacer tantas rotaciones. Que vuelva Bravo, que juegue Alba, que Alves y Piqué se pongan las pilas, que Sergi Roberto coja confianza y que Neymar y Suárez estén inspirados. Y sobre todo, que el equipo entero siga poniéndole corazón, que queda más fino que huevos pero viene a ser lo mismo.