LA ULTIMA

Quieren ganar la Liga... ¿les dejarán?

Joan Maria Batlle

CLAVE 1

El gol de Keita se celebró en el Camp Nou como si fuera el de la victoria en la final de la Champions. Los jugadores de Guardiola se avalanzaron sobre su compañero conscientes de que este gol les mantenía vivos en la Liga, con respiración asistida, sí, pero vivos a la espera de que el Madrid pinche algún día y sienta la presión del campeón en el cogote. Después de lo que se sufrió ayer, tras el nuevo atropello arbitral, el triunfo sabe a gloria. Viendo a los jugadores apretar los dientes como los apretaron y celebrar la victoria como la celebraron, no hay ninguna duda de que quieren ganar esta Liga. Pero la pregunta es: ¿les dejarán? Ayer, desde luego, el árbitro hizo todo lo que pudo para que se acabara ya la Liga. ¿Hasta cuándo durará esta persecución?

 CLAVE 2

No se trata de llorar, sino de denunciar. Cada jornada se producen polémicas arbitrales en las que el Barça sale mal parado con respecto al Madrid. Este fin de semana no será ni siquiera necesario esperar al partido de los blancos, pues es científicamente imposible que ante el Espanyol les perjudiquen en parecida medida a la que ayer Velasco Carballo lo hizo al Barça. La expulsión de Piqué, injusta a todas luces. Falta justita y, como mucho, pero mucho, ¡eh!, amarilla. Y luego tres penaltis de libro a Alves, Keita y la mano de Nacho Cases dentro del área. En la segunda parte, el Barça jugó con diez y contra doce. Y, claro, viniendo del codazo de Sergio Ramos a Costa en Vallecas que quedó impune, la roja a Piqué escuece todavía más.

CLAVE 3

El partido estaba marcado por la ausencia de Messi, sancionado por acumulación de tarjetas. A priori, era un buen día para que descansara, pero el desarrollo de los acontecimiento volvió a confirmar la importancia de Messi en el equipo barcelonista. Sin un “9” de referencia, Cesc fue el encargado de hacer sus funciones. Y no es lo mismo. Una cosa es que Leo sea el mejor del mundo también de falso “9” y la otra es que un compañero pueda brillar en una posición que no es la suya. Cesc no se encontró cómodo ahí y tuvo que ser sustituido. La prueba del “9” sigiue sin resolverse, menos mal que la segunda línea apareció cuando más se la necesitaba y con los goles de Iniesta, Keita y Xavi los tres puntos se quedaron en casa.

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