ESTO ES LO QUE HAY

Luis Enrique y Ancelotti

Luis Enrique ha pasado de estar en la cuerda floja a ser intocable

Luis Enrique ha pasado de estar en la cuerda floja a ser intocable / sport

Joan Mª Batlle

La bipolaridad del fútbol español y la inmensa rivalidad entre el Barça y el Madrid ha convertido a los entrenadores de ambas entidades en muñecos del pim-pam-pum. El fútbol, como la vida, ha cambiado, pero sobre todo ha cambiado el entorno, que ha sucumbido al tsunami que significan las redes sociales. La opinión, la crítica, incluso el marujeo, llega de todas partes, de aficionados propios y ajenos, del barrio de al lado o de Australia. Y todo crea tendencia, influye en dirigentes, futbolistas y, por supuesto, en los afectados.

En nuestro fútbol, Barça y Madrid lo acaparan todo. Son dos fenómenos mundiales, pero precisamente por ello están permanentemene expuestos al ojo público. De entre ellos, los cracks, los ídolos, son los mejor vistos por el gran hermano internauta, mientras los entrenadores y los presidentes se llevan todas las bofetadas. Es lo que antes decíamos tener buena o mala prensa, pero a lo bestia.

Me quedo con los entrenadores. Ancelotti ha ganado el Mundial de Clubs, va primero en la Liga y tiene los cuartos de la Champions en el bolsillo, pero empata contra el Villarreal y parece que no tenga ni idea. Claro que tiene un 4-0 contra el Atlético, pero aquello se superó en el momento en que el Barça perdió contra el Málaga. Lo mismo sirve para Luis Enrique, de estar al borde del cese después de Anoeta a ser intocable tras el 1-2 al City. Y lo del Málaga se compensa con el empate del Madrid contra el Villarreal. A los entrenadores del Barça y del Madrid se les juzga tanto por lo que hacen ellos como por lo que hace o no hace el gran rival. No es lógico, pero va en su sueldo vivir al borde de un ataque de nervios.

En esas estamos y seguiremos estando, hasta el punto de que no conseguir un título es más o menos grave si lo logra o no el enemigo. En el fondo, en el fútbol de nuestros días los entrenadores son víctimas del 'star-system'. Aquí lo que cuenta es Messi y Cristiano y a nadie debe extrañar que sean ellos los que realmente mandan en sus clubs. Y desde ese punto de vista, las decisiones que se toman desde el banquillo van en función de si son populares o no. Y tampoco debería ser eso...