El Barça arrebató a Neymar al Madrid

¡Chapeau! Ahora que ya está decidido que Neymar vendrá este verano es el momento de valorar en su justa medida la habilidad con la que la directiva del Barça ha llevado todas las negociaciones. Este no ha sido un fichaje cualquiera, ha sido una operación muy bien diseñada y perfectamente ejecutada. Hay que partir de la base de que el Madrid movió sus hilos por Neymar mucho antes que el Barça. Concretamente, en la primera etapa de Florentino Pérez, el club blanco ya intentó captar al entonces niño Neymar. En 2005, cuando el chaval tenía 13 años, lo llevó a Madrid, le hizo una prueba y le propuso un contrato. Vivió en casa de Robinho, con quien compartía representante, Wagner Ribeiro, pero la familia Neymar no lo vio claro y se echó atrás, entre otras cosas porque el presidente del Santos apostó fuerte y le puso 400.000 euros en el bolsillo. ¿Se imaginan un niño con 400.00 euros?, pues eso, que no era un fichaje cualquiera. Seis años más tarde, en 2011, el Madrid volvió a la carga a través del representante del jugador, Wagner Ribeiro, e incluso le hizo una revisión médica en Sao Paulo. Era septiembre del 2011. Es entonces cuando el Barça entra en acción y bloquea las negociaciones madridistas actuando de acuerdo con el Santos y no de espaldas al club brasileño, como había hecho el Madrid en lo que, a la postre, sería su tumba. Estamos en noviembre del 2011. El Santos y el padre de Neymar toman las riendas, Wagner Ribeiro cae en desgracia y Rosell consigue que el Santos renueve al jugador. Entonces cierra un contrato por el que adelanta diez millones de euros y deja espacio al futbolista para que decida cuándo viene. Hay negocio para todos y Neymar jugará en el Barça.

Decía que no ha sido un fichaje cualquiera. Chapeau a Rosell. Ideas claras, contactos claves y decisiones inequívocas. Como ha de ser.