Alves ha de renovar, pero no por Messi

Tres preguntas. Ya imagino los titulares y los comentarios de la caverna mediática el día que Alves renueve: “Claro, el que manda es su amigo Messi...”. O muy probablemente hoy mismo: “Messi renovará a Alves”. Y todo porque Leo ha manifestado que el brasileño es el jugador con el que mejor se entiende dentro y fuera del campo, algo por otra parte que se sabe por lo menos desde hace cinco años. Y no, esto no es ni será así.

Miren, Alves ha de renovar porque no hay ningún otro lateral derecho en el mundo que garantice el rendimiento que él todavía ofrece. Eso de mirar el carnet de identidad es una costumbre muy hispana que no siempre conduce a la decisión más acertada y más justa. Hay muchas variantes en la edad de un futbolista. La primera, su rendimiento presente. Un jugador no se acaba así, de sopetón. Hoy es titular indiscutible y en septiembre está acabado..., no. La segunda, su historial de lesiones. Y la tercera, su carácter, actitud y compromiso. En el caso de Alves, dos respuestas son incuestionables y otra ha de conocerla el club. Me refiero a que hoy sigue siendo uno de los mejores del mundo en su puesto, a que no presenta síntomas de agotamiento físico y a que el club, después de siete años, ha de tener muy claro cómo es y cómo se involucra Dani en los objetivos del equipo.

Yo creo que no hay dudas, que buscarle ahora un sustituto sería tan caro como arriesgado. Alves todavía tiene un par de años de altísimo rendimiento y si pide un tercero, pues se llega a un acuerdo económico y se le da, que tampoco hay nada que haga prever que para entonces no pueda dar un buen servicio al club. Y todo eso, porque se lo ha ganado, no porque Messi sea su amigo. Y en cualquier caso, no hay nada que esconder. Cuanto más amigos sean los jugadores de un equipo, mejor que mejor.