ESTO ES LO QUE HAY

Luis Enrique volvió a encontrarse sin banquillo

Los jugadores del FC Barcelona se quejaron al árbitro de la dureza con la que se empleó el Espanyol

Los jugadores del FC Barcelona se quejaron al árbitro de la dureza con la que se empleó el Espanyol / sport

JOAN MARIA BATLLE

El derbi volvió a ser un derbi, con un Espanyol intensísimo, al límite de la agresividad, como sin ninguna duda Luis Enrique esperaba, pues esta es la única manera que tiene el equipo inferior de complicar la vida al mejor equipo del mundo. A partir de ahí, entra el criterio del árbitro, cortar antes o después, permitir más o menos, sacar tarjetas y en qué momento. Yo creo que González González tardó en mostrar las cartulinas por juego duro y que no sacó todas las que debía de sacar, pero esto también se podía prever de antemano y estoy seguro de que el discurso de Luis Enrique en el descanso fue pedir más intensidad a sus jugadores para que su mayor calidad pudiera imponerse. Lo hicieron solo veinte minutos, insuficiente.

EL PROBLEMA  De entre todas las lecturas que se pueden hacer, entiendo que hay algunas que son incuestionables. El Barça, sin jugar al cien por cien, ni mucho menos, tuvo dos postes y más ocasiones para ganar. Otra, si el Espanyol hubiese jugado así toda la Liga, tendría bastantes más puntos. Y una tercera que, en clave blaugrana, es lo único positivo: fue el último partido de la etapa sin fichajes. Ayer, Luis Enrique volvió a encontrarse sin  banquillo para cambiar la dinámica del partido. Otra vez un solo cambio, la entrada de Sergi Roberto por Rakitic. Pudo hacer más, pero ¿de verdad creen que podía cambiar algo? No es la primera vez que pasa y por eso las incorporaciones de Arda Turan y Aleix Vidal, más el fichaje de un cuarto delantero, son absolutamente necesarias.