Premier League

Guardiola-Mourinho: El guión perfecto

Ni los mejores guionistas cinematográficos del mundo reunidos para escribir la mejor película de fútbol hubieran escrito algo tan sensacional. Guardiola y Mourinho viviendo en la misma ciudad y compitiendo por la misma liga. Pep, José... e incluso alguien más. El guión perfecto.

Mourinho y Guardiola, en una viñeta

Mourinho y Guardiola, las dos caras del fútbol, coincidirán en la misma ciudad / sport

Xavi Torres

Hoy mismo uno puede imaginarse el estado de la cuestión. En las oficinas de la Abu Dhabi United Group for Development and Investment, el propietario del City Mansour bin Zayed Al-Nahyan y el presidente Khadoon Al Mubarak contando dinero para no perder esta partida. Muy preocupado. Tanto como el amo del United. En la sede del Red Football Shareholder Limited la familia Glazer, con sus presidentes Joel y Avram Glazer, sumando billetes para garantizar el éxito deportivo del club más rico del mundo. Citizens contra Red Devils. La batalla que viene.

No es la más bonita del mundo pero hay quien la defiende. A partir de finales de agosto va a ser una ciudad de obligado peregrinaje para todos los amantes del fútbol. Visto lo visto, que Pep Guardiola y José Mourinho vuelvan a compartir vida profesional se antoja excitante. El Etihad Stadium (Manchester City) y Old Trafford (Manchester United) van a convertirse en los dos centros mundiales de interés del mundo del balón (con el permiso del Barcelona y del Real Madrid, por supuesto, porque los mejores futbolistas del planeta seguirán vistiendo de azulgrana y de blanco).

La presencia de los dos entrenadores más mediáticos en la misma ciudad todavía con el recuerdo en la memoria de sus apasionantes enfrentamientos en el césped y fuera de él plantea un escenario único. Ninguna campaña de turismo podría haber tenido más éxito que la contratación de estas dos personalidades. Mr. Carl Austin-Behan está feliz. Es el alcalde de Manchester.

¿Cómo va a ser el nuevo equipo de Guardiola? No hay duda de que muy diferente al de Pellegrini. Cerca de diez fichajes y la introducción de una nueva mirada futbolística van a cambiar la cara del equipo. En este sentido todo es muy transparente. Ya se sabe que el técnico catalán quiere mandar los partidos desde el control del balón.  El perfil de los jugadores que pueden llegar también es conocido. Faltan los nombres.

Txiki Begiristain, director deportivo citizen, el hombre clave en la llegada de Pep, sabe que la próxima temporada es vital. Por todo. Por el mal ejercicio anterior, por las expectativas que genera cualquier equipo de Guardiola y, por supuesto, porque en la acera de enfrente vivirá Mourinho. No se puede fallar. Hay mucho más en juego que las cuestiones deportivas puramente de club. Guardiola apreta y Txiki también. Y el presidente Mubarak. La inversión va a ser de lujo, cercana a los 250 millones de euros. Ganar o ganar. El éxito o el fracaso con el éxito y el fracaso de tu más directo rival. A muerte.

Este último párrafo sirve para Mou. Hay que cambiar a Txiki y al presidente árabe y apuntar a la familia de los norteamericanos Glazer. El United es el club más rico del mundo y tras Ferguson todo ha sido más o menos un desastre. La contratación del entrenador portugués es una respuesta a la de Pep para el City. Una decisión reactiva pero arriesgada porque los estándares del club se pueden poner en peligro si no llega la reacción deportiva que se espera. Mourinho vive bien en la victoria y mal en la derrota. Y extraordinariamente horroroso si ésta es ante Pep. Veremos.

En lo futbolístico tampoco hay dudas sobre la propuesta de Mourinho. Su equipo va a ser competitivo y va a presentarse extramotivado. Además, el guión puede superarse con la llegada de Ibra, uno de los principales detractores de la filosofía Guardiola. Otro elemento sobrexcitado...

Guardiola va a conocer otra cultura de fútbol más cercana en el gusto al vértigo que al control. Al seguidor inglés le encanta ver correr a sus futbolistas de área a área peleando cada balón dividido y, en la mayoría de los estadios, cuesta de entender un pase atrás cuando la portería está hacia delanteles. Su equipo será reconocible y el reto es mayúsculo. Ganar la Premier jugando bien, algo que, por supuesto no se le exigirá a Mou. Nadie espera de él ni siquiera una concesión estética. Que conste en acta: los dos caminos son perfectamente lícitos. en ese país.

En este sentido, a favor de Guardiola, su riqueza táctica, esa que esperan sus jugadores como volver a la escuela. En cambio, Mourinho conoce la competición perfectamente. Cada campo y cada equipo rival. Guardiola aprenderá rápido pero el portugués, listo como pocos, va a buscar sacar ventaja de su experiencia.