Tiger Woods regresa a la competición con ganas de 'comerse' el mundo

Golf

Tiger Woods volverá a la competición este jueves en Bahamas / sport

Carlos R. Galindo

Carlos R. Galindo

Jack Nicklaus, quizá el mejor golfista de todos los tiempos, lo tiene claro: “Tiger Woods puede regresar a su mejor nivel y volver a ser el número uno la próxima década”. Sí, de acuerdo, la leyenda estadounidense asume que estar 16 meses alejado de la competición por culpa de las lesiones y de tres operaciones de rodilla y otra de espalda, es un serio inconveniente. También reconoce que ya tiene una edad –cumplirá 41 años el próximo mes- y que cada vez le costará más recuperar aquel juego estratosférico que le llevó a convertirse en uno de los mejores de la historia. Pero Woods es mucho Woods. Ese es un hecho que ninguno de sus rivales se atreve a discutir. Y todos los aficionados cruzan los dedos para que se regreso al césped este jueves con motivo del Hero World Challenge que se disputará en Bahamas sea solo el inicio de algo grande. Algo a lo que Tiger ya nos tiene acostumbrados; juego excelso, talento sin parangón, carisma… El golf le necesita porque sin él, este deporte esta ‘cojo’. Le falta alma, resonancia mediática… Le falta luz.

El propio Woods admitió este miércoles que su capacidad de recuperación “ya no es la misma de antes. Ahora me cuesta más que hace unos años; no tengo la facilidad de un joven, sobre todo, para golpear la bola a casi 300 metros de distancia”, dijo. Todo y así, admitió que está muy satisfecho “ de la manera en la que estoy golpeando; le pego bastante bien. Los ‘greens’ y, en general, todo el campo, me parecen demasiado rápidos. Tal vez sea por el viento”. Tiger recordó que se espera una fuerte tormenta para las próximas horas.

El jugador más grande de su generación y posiblemente de todos los tiempos –con permiso de Nicklaus-, no ha ganado un torneo desde 2013 y su sequía de títulos en los campeonatos importantes se remonta a 2008.

La maldita espalda

Tan importante es que Tiger recupere su estado de forma como, sobre todo, su confianza. Si es capaz de eso, volverá a mostrar al mundo un swing único, casi celestial. Un movimiento propio de Fred Astaire o de Gene Kelly. Necesita que sus disparos no salgan proyectados hacia cualquier lado, sino a dónde él quiera. Eso es control mental, equilibrio, serenidad… Como dijo el inglés Paul Casey, “lo más difícil para él será mantener la concentración cuatro horas seguidas durante cuatro días”, que eso es lo que dura un torneo. El australiano Jason Day puntualizó: “Creo que esta vez ha hecho lo correcto. No se ha precipitado en volver a la competición y eso redundará en su beneficio. Si regresa es porque está bien. Yo no lo borraría del mapa tan rápido”, señaló. El norirlandés Rory McIlroy destacó: “la mejor noticia es la vuelta de Woods a la competición. Él tiene un aura y un carisma único en el circuito”.

 El 14 veces campeón de Grand Slam no ha jugado en el PGA Tour desde agosto de 2015 debido a sus problemas de espalda que desembocaron en cirugías en septiembre y de nuevo en octubre de ese mismo año. La última vez que ganó un Major fue en 2008, cuando se impuso en el Abierto de los Estados Unidos. En su historial también destacan un total de 79 títulos de la PGA americana. Desde entonces, su mejor resultado fue un cuarto lugar en el Masters de Augusta de las ediciones de 2010, 2011 y 2013, un tercero en el Open Británico de 2012 y otra cuarta plaza en el Abierto de Estados Unidos en 2010.