El British Open menos predecible

Jon Rahm y Sergio García prepararon juntos su debut en el British Open

Jon Rahm y Sergio García prepararon juntos su debut en el British Open / EFE

Sport.es

Los últimos siete ‘majors’ (desde el US PGA de 2015) han proclamado a un campeón primerizo, que se estrenaba en un Grand Slam. ¿Sucederá lo mismo en el British Open que da inicio hoy en el siempre desafiante Royal Birkdale?

Se anuncian lluvias y viento durante los cuatros días de competición y eso puede dificultar todavía más un recorrido que, en 2008, ya demostró ser uno de los rivales a batir (no se bajó del par del campo). “Mentalmente será mucho más difícil de ganar que otros”, sentenciaba un campeón del Masters y el US Open, el estadounidense Jordan Spieth.

Él y otros pesos pesados como el número uno, Dustin Johnson (su posición no está en peligro), el australiano Jason Day o el norirlandés Rory McIlroy se han mostrado discretos en sus últimas apariciones: ninguno de ellos ha superado el corte en los dos últimos torneos disputados. Aunque, con ellos, es mejor no confiarse porque el ‘click’ puede producirse en cualquier momento.

Al otro lado de la balanza, los más jóvenes, los que están deseando dar el zarpazo. Spieth no descarta que sea uno de ellos quien gane. 

Pero muchos ojos están puestos en las horas previas en el golf español. Sergio García, con su triunfo en el Masters de Augusta, dejó atrás muchos fantasmas y en Royal Birkdale estará acompañado por un trío que estas últimas semanas ha dado un paso adelante: Jon Rahm, campeón en Escocia; Rafa Cabrera-Bello, en Irlanda y el barcelonés Pablo Larrazábal.

“Yo no soy el nuevo Seve”, protesta Rahm

Los medios británicos idolatraban a Severiano Ballesteros. Y llevan años esperando ver al nuevo ‘Seve’.

Se han fijado en Jon Rahm pero el vasco se ha mostrado tajante en las horas previas al inicio del British Open: “Para cualquiera que me compare con él... Yo nunca voy a ser Seve aunque que me comparen con él es maravilloso. Si volvemos a ver a alguien como él será muy, muy especial”, sentenció antes de confesar que “si hiciera una cuarta parte de lo que él hizo, estaría satisfecho con mi carrera. Yo voy a intentar emular el espíritu de lucha, el instinto de superación y el poder de inspiración que tenía Seve y que atraía a tanta y tanta gente”.

Rahm no quiere prisas: “Si tardo 85 ‘grandes’ en ganar uno seguiré estando satisfecho con lo que hago” y aseguró que está contento por no haber coincidido con la época dorada de Tiger Woods.