El Girona saca un punto de fe de Balaídos

Stuani anotó el segundo gol del Girona ante el Celta

Stuani anotó el segundo gol del Girona ante el Celta / EFE

Carles Rosell

Con fe y perseverancia el Girona salvó los muebles en Vigo, sumando un punto de oro cuando todo parecía perdido. Juanpe, a cuatro minutos del final, igualó un duelo de lo más disputado, con alternativas en el marcador y que parecía que se zanjaría con el Celta como victorioso.

Con cuatro caras nuevas respecto el día del Barça (Mojica, Alcalá, Borja y Stuani), salió a morder desde el primer suspiro. A diferencia de hace unos días, cuando mostraron una imagen apática y desconocida ante los azuglrana, en Balaídos fueron a por todas con el pitido inicial. El equipo estuvo tan eléctrico arriba como desconcertado atrás, lo que propició un inicio de lo más loco, con cuatro goles en poco más de un cuarto de hora. Tras los primeros avisos de Portu y Maffeo, fue el Celta el que desequilibró la balanza. Sisto culminó una gran contra con Aspas y Wass como protagonistas. 

No se arrugaron los de Machín, acabando con una sequía de 434 minutos sin ver puerta. Portu, el más pillo de todos, se adelantó a la defensa y remachó con el alma un centro del omnipresente Mojica. Acto seguido, en una acción de estrategia digna de matrícula de honor, Stuani hizo el 1-2 conectando el balón cedido desde el otro palo. Pero todo lo bien que lo habían hecho los gerundenses en ataque, lo tiraron por la borda al defender fatal un ataque de los locales. Tanto, que Maxi recibió en tres cuartos de campo solo, encaró Iraizoz y le superó con mucha frialdad. 2-2, y todo un mundo por delante todavía. 

Reculó el Girona tras el descanso y dejó que fuera el Celta el encargado de dominar. Tanto tuvo la pelota el equipo de Unzué que acabó llegando con peligro. Iraizoz protagonizó una doble intervención de mucho mérito en el 70, pero hizo la estatua poco después en un tiro lejano de Wass que supuso el 3-2. Y cuando todo parecía perdido, los de Machín tiraron de orgullo y fe para empatar. Juanpe se vistió de salvador y en el 86 anotó un gol que bien vale un punto de oro para su equipo.