Mundial Rusia 2018: Grupo G

España fue mejor, no supo sentenciar y dio vida a Italia

Vitolo abrió el marcador, perdonó una excelente ocasión para matar el partido, y De Rossi empató en un penalti cometido por Ramos

Josep Bosch

La selección española tuvo la oportunidad de dar un paso de gigante hacia el Mundial de Rusia pero se dejó dos puntos ante Italia en un buen encuentro del equipo de Julen Lopetegui, al que le faltó instinto asesino para sentenciar, dando opción a que Italia, con muy poco, igualara el partido.

Tan solo la ausencia de gol impidió que el conjunto de Julen Lopetegui firmara un primer tiempo sobresaliente. El juego de la selección española fue notable, con buenas triangulaciones que encontraron huecos en el siempre buen entramado defensivo de la 'azzurra'.

Con Iniesta y Silva muy activos, España llegaba con cierta fluidez a las inmediaciones del portal de Buffon. Una excelente combinación entre ambos centrocampistas propició un disparo del manchego demasiado flojo para sorprender al meta italiano.

Fue el primer aviso, al que siguió un disparo de Diego Costa que impactó en un rival tras buen servicio en profundidad de Silva. Mediado el primer tiempo, la insistencia de la selección española fue máxima y las ocasiones más peligrosas fueron protagonizadas por los dos centrales. Un cabezazo de Piqué a centro de Iniesta topó en un defensor italiano y acto seguido un centro de Carvajal, prolongado de cabeza por Sergio Ramos hacia el centro, permitió otro testarazo de Piqué, bien replicado por Buffon.

A Italia parecía importarle poco que el rival tuviera el balón, pero el equipo de Giampiero Ventura apenas inquietó a De Gea, sin poder utilizar sus poderosas contras. La única opción fue en un saque largo de Buffon bien despejado por Jordi Alba, que impidió la incursión de Pellè hacia el portal español.

Sin movimiento en el marcador y con Jordi Alba Montolivo damnificados por el llamado virus FIFA se llegó el descanso.

El mejor juego del equipo de Lopetegui tuvo incidencia en el luminoso merced a un obsequio de Buffon, que se tragó el balón en un pase en profundidad de Silva hacia Vitolo, marcando el sevillista a placer.

Italia intentó reaccionar, Pellè cabeceó fuera por poco y España dispuso de una excelente ocasión para matar el partido en una contra que Vitolo cruzó en exceso tras buen servicio de Koke.

Lejos de optar por ceder metros ante la previsible reacción italiana, Lopetegui buscó la sentencia y dio entrada a Morata en lugar de Diego Costa, que volvió a evidenciar su poca cabeza arriesgándose a ver una segunda amarilla de forma absurda.

Cuando parecía que el arreón final de Italia apenas hacía mella en España, una entrada de Ramos sobre Eder fue sancionada con penalti, que De Rossi aprovechó para empatar el encuentro.

El gol tuvo un impacto psicológico porque el equipo de Ventura se creció ante una selección española que perdió todas sus anteriores virtudes. El encuentro parecía más decantado hacia el 2-1 aunque el marcador no volvió a moverse, finalizando con un empate que la selección española quizás habría firmado antes de empezar el partido pero que fue frustrante visto lo sucedido en la mayor parte del encuentro.