Argentina es el mayor exportador de jugadores de fútbol

El país superó incluso a Brasil, con las transferencias de más de 1900 futbolistas por un total de 244 millones de dólares en 2013

Sport.es

Argentina produce mucho más que soja y automóviles. Según el último informe Football Player Exports 2013 elaborado todos los años por la agencia Euromericas Sport Marketing, por tercer año consecutivo Argentina es el mayor exportador de jugadores de fútbol del planeta entero.

Hasta el 2010, era Brasil el principal exportador por sobre Argentina en un 24%. Esta situación comenzó a cambiar en 2011 en donde ese sitio lo ubica Argentina. En el último año, la Argentina exportó un total de 1945 jugadores, en tanto Brasil sigue en la lista con un total de 944. Este negocio reportó 275 millones de dólares a Argentina en 2013, convirtiéndose en uno de los sectores más pujantes en el ingreso de divisas extranjera al país, a través de los pagos y las comisiones.

Los argentinos exportados tiene como destino en un 67 % los países que cuentan con las cinco ligas más importantes del mundo: España, Inglaterra, Alemania, Italia y Francia. El resto tuvo como destino ligas menores de ese continente, así como Rusia, Grecia,  Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, tal como explica el Profesor Emerito en Marketing Deportivo Gerardo Molina creador de la medición y Director del informe a nivel mundial.

Por otra parte, Euromericas Sport Marketing, exaltó que, comparado con el año anterior, se registró un aumento del 22% en la exportación de jugadores cada vez más jóvenes y a más alto costo de venta. "“En los últimos tres años se percibe que los jugadores que salen del país buscando nuevos destinos futbolísticos, ni siquiera han debutado en un club afiliado a la Asociación correspondiente a Argentina y Brasil. Si tienen una oferta de un club extranjero, no la desaprovechan porque no saben si años después ese jugador valdrá lo mismo. Puede valer más o menos, pero no se puede arriesgar", explica José Maria Sorolla responsable del informe en España y Europa.

Argentina sigue siendo un expulsor permanente de jugadores, porque eso es lo que permite que dirigentes, intermediarios y jugadores consigan ingresos para sus clubes con altos pasivos económicos y endeudados financieramente.