¿Quién está detrás del robo de Football Leaks?

Cristiano Ronaldo es protagonista de los papeles de Football Leaks

Cristiano Ronaldo es protagonista de los papeles de Football Leaks / EFE

sport.es

Los papeles de Football Leaks han cogido protagonismo en los últimos meses, sobre todo a raíz de las filtraciones de contratos de diferentes estrelals del fútbol mundial y de sus representantes. No obstante, la publicación de los contratos de Cristiano Ronaldo, estrella portuguesa del Real Madrid, y de su supuesto fraude fiscal ha devuelto a la primera página de la actualidad a estos papeles.

Es más, el hecho de que un juez haya intervenido prohibiendo la públicación en Europa de los papeles de Football Leaks aún le ha dado más notoriedad al caso. Pero, ¿quién está detrás del robo de los documentos de Football Leaks?

Según informa la Cadena Ser, el despacho Senn Ferrero, uno de los afectados por las últimas filtraciones de Football Leaks, ha denunciado ante el juez Arturo Zamarriego que existe una "organización criminal" detrás del robo de los 180.000 documentos.

Según la misma información, en el escrito presentado por Senn Ferrero, se acusa directamente al hacker y a los medios que han difundido los documentos de formar esa "organización criminal". Senn Ferrero recuerda que presentó denuncia en marzo de este año por el robo de “información confidencial y secreta entre abogado y cliente” junto con un informe pericial “que detallaba el modo de acceso, cómo se había realizado el robo y la relación de los documentos sustraídos”.

Además, el despacho también denuncia que el hacker intentó extorsionar en marzo a los agentes de al menos dos futbolistas afectados por los papeles. Habría exigido a los representantes un millón de euros para evitar la difusión de los papeles.

Senn Ferrero diferencia el caso de Football Leaks de la famosa lista Falciani ya que "el señor Falciani tuvo un acceso lícito a la información puesto que trabajaba en el banco HSBC y comunicó esta información a las autoridades francesas”.

Concluye el escrito, según la Cadena Ser, que "al igual que no se publican vídeos de una agresión sexual, tampoco pueden publicarse correos electrónicos entre un bufete de abogados y su cliente donde se revelan estrategias de defensa o cuestiones íntimas sobre la fiscalidad o el patrimonio de sus clientes”.