FÓRMULA 1 - GP DE ESTADOS UNIDOS

Ferrari y Vettel, en sus horas más bajas

El sueño se ha esfumado. Ferrari no ha aprendido de los errores del pasado y Sebastian Vettel está viviendo la cruda realidad de Maranello.

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JOSEP VIAPLANA

Después de ganar tres carreras en su primer año y prometer que lucharían por el título en 2016, el binomio Ferrari-Vettel está en horas bajas. No solo no han podido con Mercedes sino que Red Bull les ha superado y en las últimas carreras el alemán ha visto como también le pasaba por encima Kimi Raikkonen. El finlandés abandonó ayer en Austin cuando iba por delante del germano porque le pusieron mal una rueda en el pitstop.

Se criticó la decisión de Fernando Alonso de abandonar la Scuderia y cambiar a McLaren. Parecía una locura. Vettel consiguió tres triunfos y trece podios el curso pasado. Todo eran sonrisas. Seb parecía el remedio a todos los males en Ferrari. Se hablaba de éxitos, títulos y la reconquista de la gloria perdida.

Les toca vivir la otra cara de la moneda. Vettel no ha ganado ninguna carrera este año, solo ha subido seis veces al podio y presenta peores números que Alonso en su segundo año en Ferrari. ¿Qué pasa en Maranello? “Ya no son un equipo, sino un grupo de personas asustadas. Allí adentro hay un clima de terror, los muchachos no inventan nada, no quieren decidir nada por temor a ser expulsados”, ha desvelado esta semana Luca Baldisserri, que fue durante muchos años ingeniero jefe de la Scuderia y cuya solución para Ferrari “es encontrar una organización eficiente y estabilidad, además de tener la necesidad de que los pilotos no cometan errores”.

Sebastian Vettel ya ha perdido la sonrisa. Se ha vuelto serio y uraño y su nerviosismo se hace patente en las carreras, tanto por sus errores como por los mensajes humillantes que lanza por radio hacia sus rivales, impropios de todo un tetracampeón. Los fallos de estrategia y gestión de carrera también están ridiculizando al equipo, que tras la marcha de James Allison ha perdido el rumbo.