FÚTBOL TOTAL

El Tata se suicida y regala la Liga

Javier Rodríguez Marzo

JUSTO cuando parecía haber tocado la tecla correcta, la que permitió sentenciar el pase a la final de la Copa del Rey, precisamente ante la Real Sociedad, y asegurar casi de forma definitiva los cuartos de la Champions, va el Tata y decide rotar e inventar...

Justo cuando todo el mundo, Tata incluido, había comprendido lo que decían los puristas, a los que casi crucifican por herejes en plaza pública a principios de temporada, que el Barça, que este Barça, es grande a través de los pequeños, que le permiten atacar más y defender mejor, va el Tata y deja en el banquillo a Xavi y a Cesc...

Justo cuando el equipo afrontaba el desplazamiento -Bernabéu aparte- más difícil de lo que queda de Liga, va el Tata y decide desplazar a Busquets al interior y darle el mando a Song...

Justo... justo cuando supe la alineación que preparaba el Tata, con la guinda de Bartra y Montoya en la defensa, me temí lo peor...

Ojalá me hubiese equivocado. Ojalá Messi hubiera tapado mi agorera bocaza como hizo con el gol del empate... Pero no. Las decisiones suicidas del Tata eran la crónica anunciada de una derrota que bien puede costar una Liga. 

Y lo peor es que viendo la que se venía encima, el técnico no supo reaccionar  como debía en el descanso. Todo lo contrario. Se enzarzó en discusiones y acabó expulsado. El Tata perdió ayer el norte y el Barça el rumbo.