Grigor Dimitrov cortó el paso a Jack Sock

Grigor Dimitrov

Grigor Dimitrov busca su primer título de 'maestro' / AFP

Neus Yerro

Grigor Dimitrov será el rival este domingo (19.00 horas, Movistar+ Deportes 2) de David Goffin en la final del Masters de Londres. El búlgaro cerró el paso al estadounidense Jack Sock por 4-6, 6-0 y 6-3 en una hora y 58 minutos de juego.

Los inicios de los dos primeros sets fueron prácticamente calcados: dominio del búlgaro, más convencido, más valiente, yendo a por sus golpes. Se situó 3-0 y dispuso de punto para el 4-0. Sin embargo, a partir de ahí las dos mangas fueron historias distintas.

En el primer parcial Grigor no sacó provecho a esa oportunidad y permitió a Sock, que empezó a golpear y a dominar los puntos con sus endiabladas derechas, regresar a la batalla para irse creciendo juego tras juego hasta que Dimitrov entregó su saque en el peor de los momentos, en el noveno ‘game’. Jack tenía la oportunidad de servir para anotarse el parcial. Cosa que hizo.

El búlgaro sólo había tenido problemas en su debut en la competición frente al austríaco Dominic Thiem. Después, plácidas y convincentes victorias ante Goffin y Pablo Carreño, sustituto de Rafa Nadal, lesionado.

Había que ver si el pupilo de Daniel Vallverdu era capaz de reagruparse y volver a sus esquemas de juego. Lo hizo. Con disciplina y convicción y esta vez, cuando tuvo la oportunidad de situarse 4-0 no la dejó escapar... es más, no dejó escapar ni un solo juego. 

Ahora era el turno de Sock de reaccionar. Dejó de discutirse con su banquillo para centrarse en el juego. Igualdad en el marcador hasta el octavo juego. Ahí Dimitrov rompió la baraja a su favor (5-3) y aunque necesitó un 'game' de nueve minutos y salvar dos puntos de 'break', a su cuarto 'match ball', el búlgaro levantó los brazos.

Habrá campeón inédito. Pero eso ya se supo desde el momento en que David Goffin certificó la, probablemente, mayor sorpresa de estas Finales ATP, al doblegar a Roger Federer.

Si hacemos caso de las estadísticas, el favorito es Grigor. Más con el último precedente, en la fase de grupos, en la que arrolló al belga. Pero esto es una final. Una oportunidad única y nueva para ambos (habrá campeón inédito). Y en este torneo ya hemos visto que la lógica no es la que manda.