Mourinho celebra el título que nunca quiso jugar

Mourinho, besando la Europa League

Mourinho, besando la Europa League / EFE

Ricard López

Ricard López

Eufórico, saltando tanto o más que sus jugadores y entonando el “¡Campeones, campeones!” sobre el césped del Friends Arena. Así celebró José Mourinho el cuarto gran título europeo de su carrera, después de la Copa de la UEFA lograda con el Oporto en 2003, y las dos Champions ganadas con equipo luso en 2004 e Inter de Milán, en 2010.

El ex técnico madridista, que fue incluso manteado por sus colaboradores, tenía razones para estar satisfecho. Además del título, su equipo se clasificó para la próxima edición de la Champions, algo que no había conseguido al acabar la Premier en la sexta plaza.

Mourinho salvó así una temporada más bien discreta, en la que hasta ahora sólo había alzado la Community Shield y la Copa de la Liga.  Un bagaje que no se correspondía con el astronómico gasto realizado en fichajes por el United: unos 180 millones de euros, repartidos entre las contrataciones Paul Pogba (105)Mkhitaryan (42) y Eric Bailly (38).

No deja de ser curioso que la tabla de salvación de los ‘red devils’ haya sido la Europa League. Un título que Mourinho menospreció varias veces en el pasado, cuando lo consideraba un trofeo menor. Tanto que, en 2013, tras volver al Chelsea, se atrevió a decir que “ganarla sería una decepción”, en una clara indirecta a su antecesor en el cargo, Rafa Benítez, que la había conquistado tres meses antes. La historia se repitió en 2015, cuando ‘su’ Chelsea condenó al Oporto de Iker Casillas a la tercera plaza en la fase de grupos de la Champions: “A lo mejor hemos ayudado a Iker  a ganar la única Copa que no tiene”, dijo, mofándose del ex madridista.

Esta vez fue distinto: “Este título significa mucho, no sólo porque el United nunca lo había ganado. Estoy contento, también por la solidez que hemos demostrado”, dijo en declaraciones a BeIN Sports. “Este club es gigante, como Madrid o Barça. Llevábamos tres o cuatro años difíciles, pero no hay mejor forma de construir que ganar. Ahora, volvemos a la Champions, aunque no como candidatos. Habrá que mejorar y hacer fichajes. ¿Griezmann?. No hablo de él, sería una falta de respeto para el Atlético”, añadió.

Ya en rueda de prensa, Mourinho tuvo palabras de recuerdo para las víctimas del atentado del lunes en el Manchester Arena, en el que fallecieron 22 personas: "Si pudiésemos, obviamente, cambiaríamos ahora mismo la Copa por que ellos vivieran", dijo. "¿Si este título hará un poco más feliz a la ciudad de Manchester? Quizá. Pero nosotros sólo hicimos nuestro trabajo", agregó.