Los problemas para el domingo

Pochettino, un mar de dudas

El técnico solo cuenta con 13 jugadores de campo con ficha del primer equipo para reencontrarse con el triunfo frente a Osasuna

German Bona

El Espanyol no gana desde hace tres partidos y es necesario que el domingo, ante Osasuna, se reencuentre con la victoria. El dato ha pasado prácticamente desapercibido por el buen nivel mostrado por el equipo, a pesar de no llevarse la victoria, tanto en Málaga, donde perdió, como en los empates sin goles frente a Villarreal y Real Sociedad.

Pero los problemas se le están acumulando a Mauricio Pochettino, que es ahora mismo un mar de dudas y ya empieza a asumir que el domingo tendrá de nuevo que confeccionar una alineación cogida con pinzas.

Estamos ya a viernes, quedan solo dos entrenamientos antes del partido, y no parece que el entrenador pueda recuperar a ninguno de sus lesionados.

Lógicamente, Javi Márquez está descartado, desde el momento en que se informó que estaría 10 días probándose a una mayor intensidad con el objetivo de evitar el quirófano. El de Badalona sigue con las dobles sesiones, como el resto de lesionados, y acude al CAR de Sant Cugat, pero no se entrena junto a sus compañeros.

Tampoco lo están haciendo Javi López y Pandiani, y todo parece señalar que volverán a ser baja. El uruguayo tiene una especial motivación por enfrentarse a su exequipo, pero los molestias persisten. De todos, el único que podría tener una posibilidad es Sergio García. Está evolucionando bien de su elongación y ya ha empezado a hacer algunos ejercicios con el grupo. Lo tiene realmente complicado, pero habrá que esperar al entrenamiento de hoy antes de descartarlo.

Así las cosas, el único que volvería al equipo contra Osasuna es Juan Forlín, que no jugó en Anoeta por sanción. Precisamente, la entrada del argentino puede provocar un movimiento de piezas, pues a Pochettino le pasa ahora que en algunas posiciones no tiene a nadie y en otras, como el pivote defensivo, cuenta con varias alternativas.

El técnico no variará, después de dos partidos consecutivos sin encajar goles, el eje de la defensa, con Raúl Rodríguez y Héctor Moreno, así que si Forlín entra en el equipo sería en el mediocentro. Pero eso significaría volver a sentar en el banquillo a Baena, un futbolista que necesita continuidad.

Si jugaran los dos, saldría un doble pivote a priori demasiado defensivo para jugar en casa ante Osasuna, y supondría avanzar a Romaric a la mediapunta y `sacrificar¿ de nuevo a Verdú en banda. Weiss se ganó otra oportunidad tras su destacable partido en San Sebastián y cambiará de carril, seguramente para que Dátolo y Thievy se jueguen el extremo izquierdo. Otra duda está el lateral derecho, pues Galán, atenazado por las críticas, está por debajo de su mejor nivel. La única solución viable es poner a Amat de lateral, posición que ya ocupó en el pasado alguna vez.

Un mar de dudas ahora mismo a la espera de que se disipen en estos dos últimos entrenamientos. Ganar a Osasuna significaría volver a la senda del triunfo y continuar en una buena posición. Tropezar, teniendo en cuenta que luego hay que visitar al Valencia y viene el Atlético, equivaldría a ponerse en problemas, ahora que todo está un poco más tranquilo. Así que es necesario ganar, pero la realidad es que Pochettino solo cuenta en estos momentos seguros con 13 jugadores de campo con ficha del primer equipo. Un hándicap evidente.