El Espanyol puede hacer caja con Javi Márquez, Verdú o Héctor Moreno

El mercado de invierno recién finalizado no ha resultado tan `movido¿ como el de hace un año en cuanto a salidas. Hace doce meses los traspasos de Víctor Ruiz y Dídac Vila por necesidades económicas crearon un cisma entre los seguidores blanquiazules; mientras que ahora solo han dejado la plantilla Kameni y Dátolo que no han levantado tanta repercusión entre los aficionados. Pero el Espanyol, dentro del plan de reajuste económico diseñado por el Consejo de Administración, que presentó en la última Junta de Accionistas celebrada en diciembre, necesita hacer una venta como mínimo durante el presente ejercicio para cumplir con el objetivo fijado de dejar la deuda en 82 millones de euros en la temporada 2013/14.

La necesidad de vender no es novedosa, pues ya la anunció el propio Germán de la Cruz en la Junta de Accionistas. El club necesita ingresar por traspasos de jugadores en un horquilla que va entre los 10 y 15 millones de euros en dos ejercicios, tal y como adelantó SPORT en el mes de diciembre. A partir de entonces, los traspasos serían por cuestiones deportivas o porque la oferta es importante, no por obligación. El plan económico, sin embargo, está abierto a matizaciones como por ejemplo la que se ha realizado estos días. Las salidas de Kameni y Dátolo han permitido un ahorro de casi 1,5 millones de euros, cantidad que casi en su totalidad se ha invertido en la contratación de Coutinho, Uche y Víctor Sánchez y no se ha destinado a reducir el coste de la plantilla.

Joan Verdú, Javi Márquez (si se recupera bien y tiene una participación activa y destacada en la fase final del campeonato) y Héctor Moreno son en estos momentos las tres opciones más probables de venta que contempla el Espanyol de cara a los próximos meses y que podrían permitir que el plan económico siga cumpliendo los objetivos fijados. Son, a priori, los futbolistas más apetecibles del plantel, puesto que Weiss y Romaric no son propiedad del Espanyol.

Los casos de Verdú y Márquez tienen una circunstancia especial y es que acaban contrato el 30 de junio del 2013. La planificación en el club está clara: o se llega a un acuerdo para la renovación de sus contratos antes de finalizar la temporada o habría que trabajar un traspaso, pese a la importancia que ambos futbolistas tienen en los esquemas tácticos de Pochettino. Especialmente dolorosa sería la salida de Verdú, un jugador imprescindible en ataque, pero más doloroso para la economía de la entidad es que cumplieran contrato y no se ingresase nada por ello. Si en las próximas semanas no hay novedad en la renovación de ambos, la maquinaria del Espanyol se pondría en marcha...

La situación de Héctor Moreno es diferente a las anteriores. El mexicano, con contrato hasta el 2015, está siendo observado muy de cerca por varios clubs europeos puesto que la posición de central zurdo es muy buscada. En el Espanyol no descartan, ni mucho menos, que al concluir la temporada llegase una propuesta que obligase a desprenderse del mexicano. Eso explicaría, por ejemplo, que en las últimas semanas Mauricio Pochettino tenga muy controlado a Zou, que es central zurdo en el filial. Los técnicos, en cierta forma, asumen que existe un riesgo importante que Moreno tenga que emigrar. Eso sí, se haría bajo unas buenas condiciones económicas.