Cornellà-El Prat vuelve a ser un fortín y el Espanyol ya mira a Europa tras derrotar al Sevilla

Joan Pi

El inicio de partido marcó la contienda. Algunos todavía no habían tomado asiento cuando el árbitro indicó el punto de penalti y sacó la tarjeta roja a Pareja, tras una caída de Piatti en el área sevillista. Reyes, con aplomo, engañó a Rico e hizo subir el primer tanto en el marcador de Cornellà-El Prat.

Era el minuto 3 y el Espanyol obtenía doble ventaja, en el marcador y por superioridad numérica en el campo. Una situación inesperada que cambió las expectativas de ambos equipos y que el Espanyol supo manejar de forma acertada en el global del encuentro.

El Sevilla, pese al mazazo inicial, no cambió su planteamiento. Sampaoli dio entrada al central Lenglet en lugar de Ben Yedder y mantuvo el dibujo con un solo atacante, Jovetic. De la mano de Nasri, el conjunto hispalense se vino arriba y se hizo con el dominio del choque mientras el Espanyol esperaba atrás la posibilidad de una contra.

El mejor juego de los andaluces tuvo su premio a los veinte minutos, justo cuando el Espanyol jugaba también con diez por lesión de Hernán Pérez, al rematar Jovetic a gol una excelente combinación entre NzonziVázquez Nasri, que asistió al goleador en el tanto del empate.

El dominio visitante inquietaba a un Espanyol que tras el empate decidió estirarse un poco y buscar las bandas. Pero no se producían situaciones de peligro y el Sevilla seguía marcando el ritmo al partido. Tanto le costaba al Espanyol llegar a las inmediaciones de Sergio Rico que el central blanquiazul David López lo intentó con una genialidad en el 34'. Viendo avanzado al meta andaluz, con toda la intención buscó sorprenderle con un tiro desde ¡60 metros! que Rico logró desviar apuradamente. Habría sido el gol de la temporada.

Tras el susto, siguió el Sevilla imponiendo su mayor calidad en el medio campo y teniendo más opciones, como Nasri en el 37', para adelantarse en el marcador. Pero cuando el esfuerzo hizo mella en los andaluces, y el Espanyol olió a sangre, el partido dio un giro radical. Los últimos cinco minutos del primer periodo sometió al Sevilla encerrándolo en su área y las ocasiones se sucedieron en cascada.

En el 41' un centro de Reyes lo remató ajustadísimo Gerard Moreno. La presión blanquiazul se incrementó exponencialmente y se sucedieron tres saques de esquina. En uno, Jurado acabó la jugada con remate. En otro fue Hernán Pérez quien buscó portería. Tras el tercero se produjo una falta lateral que sería la definitiva. Era el minuto 46 y lanzó Reyes hacia el punto de penalti, donde emergió la figura del joven Marc Navarro para conectar un testarazo al fondo de las mallas. Segundo partido del lateral canterano en el primer equipo y segundo tanto de Navarro con el Espanyol. Toda una revelación.

Tras el descanso, el Sevilla prosiguió llevando el peso del juego en busca de un empate que nunca llegó. El Espanyol le regaló el balón a los sevillistas tal y como había hecho tras el 1-0 y a partir de ahí hubo cierto intercambio de golpes. Pero pasada la hora de partido con un jugador menos, el Sevilla fue perdiendo fuelle. El esfuerzo realizado empezó a pasar factura y los andaluces ya no tenían la frescura de la primera mitad.

Los de Sánchez Flores dieron un paso adelante y en el minuto 71 llegó la sentencia del partido. En la acción previa al tercer gol local, Reyes estrelló un zurdazo en el larguero y hubo un remate posterior de Moreno, sin consecuencias. Pero siguió el juego y el balón acabó en la banda derecha donde el más que notable Marc Navarro conectó un centro perfecto que Gerard Moreno, esta vez sí, remató en plancha a gol.

Estaba todo decidido. El Sevilla intentó recortar con más corazón que piernas y para el Espanyol fue relativamente sencillo dormir el partido hasta el pitido final y certificar un triunfo que le sitúa a cinco puntos de las plazas europeas.