Aguirre no tolera más relajación

El Espanyol visita esta tarde Anoeta instalado en una zona de confort que, como el propio Javier Aguirre reconoce, "no tiene sentido" y corre el peligro de confundirse con la relajación y el dejarse llevar. Es cierto que la salvación es ya virtual y Europa, una utopía, pero el entrenador ha sido el primero en entender que una temporada más que aceptable se puede echar por la borda con otro triste final. El reto de los 50 puntos que el mexicano se ha hecho suyo para motivar a la plantilla, y en el que ayer volvió a insistir, parece que no está calando demasiado hondo y el 'Vasco' sacó ayer el 'látigo' en el entrenamiento a puerta cerrada. Para más inri, lo explicó después ante la prensa: "Tuve que llamar la atención a un par de jugadores como hace tiempo que no lo hacía. Tenemos que luchar por la camiseta y por el escudo, no podemos pensar que muy mal tenemos que hacerlo para bajar, no es eso...". Fue un buen 'toque'.

Máxima tensión esta tarde es lo que quiere Javier Aguirre, alertado tras los dos últimos partidos del equipo y el hecho de que solo se haya sumado un punto de los últimos nueve: "Estamos en deuda, nos debemos a la afición y vamos a Anoeta a por los tres puntos. No podemos hacer una tercera mala actuación y para que no se repita, hay que meterse en el partido desde el primer minuto".

El técnico no piensa dejar pasar una y está por ver si hoy realiza cambios respecto al once titular para tener a todo el mundo bien enchufado. Entiende incluso los silbidos en algunas fases del partido frente al Rayo: "Fue la primera vez que sucede desde que estoy aquí y la afición tenía razón". Es contundente, pues sabe que, al final, será "juzgado por los resultados". No tolera más relajación.

Habrá que ver si el toque de atención ha surgido efecto y hoy en Anoeta, ante una Real Sociedad que necesita la victoria para asegurar Europa y que tampoco anda fina, el Espanyol sale la mejor actitud para no estropear una temporada que, ciertamente, ha sido buena en líneas generales. Además, que a nadie se le olvide, falta un punto para alcanzar los 42 que garantizan la permanencia y hoy bastaría con un empate para finiquitar el objetivo. Pero sobre todo estará en juego la imagen. Aguirre quiere que el equipo no renuncie al balón, aun manteniendo sus armas en la presión y el contragolpe. Sidnei seguirá en el eje de la defensa por Héctor Moreno, y Abraham y Mattioni se han quedado fuera lesionados junto a Capdevila, éste por decisión técnica. A la Real, por su parte, le faltan dos piezas clave: Griezmann e Íñigo Martínez. No hay excusas...