SOBRE EL TERRENO

Y Sergi Roberto se convirtió en Pogba, Gündogan y Vidal

Sergi Roberto

Sergi Roberto / sport

EMILIO PÉREZ DE ROZAS

Lo siento, sí, no me importa volver a ser yo. Yo mismo, venga, si no lo escribe nadie, lo escribiré yo. Bravo, Mathieu, Alba, Rakitic, Sergi Roberto, Neymar y Suárez son del Barça… y de Andoni Zubizarreta, el director deportivo despedido hace ya casi un año y que, el sábado, vivió, en la soledad de su casa barcelonesa, una de las goleadas más hermosas de los últimos años. Fue, posiblemente, el único que no recibió WhatsApp alguno por parte de la plantilla, cuadro técnico y directiva. No importa. Él sí envió unos cuantos para compartir esa felicidad, pues aún sigue considerando suyos los triunfos y las derrotas, sí. No lo dice, ni lo cuenta, pero se le nota en la cara.

Ahora se ha puesto de moda que Florentino Pérez entre al trapo de todas las críticas, convocando, no solo una directiva y citando a los medios en la sala de las columnas del Bernabéu para asegurar que todo, todo, se debe a una campaña de desprestigio que los medios de comunicación han puesto en marcha en su contra, ahora que muchos consideran que el descalabro del equipo se debe a que el club de Chamartín no tiene director deportivo, pues todas las decisiones están en manos del caprichoso y rico presidente blanco, es, de nuevo, lo siento, sí, vuelvo a ser yo, el momento de reivindicar la tarea de Zubizarreta.

El 16 de julio de 2013 aparecía, en la web del FC Barcelona, una pequeña entrevista en la que el entonces director deportivo azulgrana aseguraba, tras la marcha de Thiago al Bayern, que provocó ríos de tinta y críticas contra su persona, lo siguiente: “Se va Thiago y nuestra apuesta para el centro del campo es Sergi Roberto, en quien tenemos depositada mucha confianza”. Y Sergi Roberto ha terminado convirtiéndose en el Pogba, Gündogan y/o Arturo Vidal que todo el mundo reclamaba, exigía y pedía. ¿Cuánto pagaría ahora el Barça por Sergi Roberto? Millones, como poco lo que pagó el Real Madrid y su ‘director deportivo’ por Danilo, Isco y James, ridiculizados el sábado, como tantos otros.