Cuando el Real Madrid da la nota

Es una de las serpientes de otoño-invierno. Un tema recurrente, un tema muy necesario para los periódicos deportivos, un tema digno de la dualidad Madrid-Barcelona (incluso a nivel periodístico), un tema que siempre gira, como no, alrededor de Leo Messi y Cristiano Ronaldo, como si no existiesen más futbolistas en el mundo. El Balón de Oro, el premio que todo el mundo considera que designa al mejor futbolista del planeta, ha vuelto a revolotear por el ruidoso mundo del fútbol.

Y lo ha hecho, y ese es el lamento (perdón, lo lamentable) de la mano del Real Madrid, el primer club que se atreve a hacer un comunicado de prensa pidiendo que gane uno de los suyos. Bueno, no, pidiendo que gane Cristiano, que, en septiembre de 2012, no se sentía querido por su club, su afición y el entorno y ahora es el 'puto amo' de la situación.

Es tan el ‘puto amo’ que también fue el Real Madrid (TV) el primer club del mundo en manipular los datos, los goles, para convertir a su estrella (de cuya brutal calidad nadie duda) en el máximo goleador de la Liga, cuando todo el mundo sabe que el máximo goleador de la Liga es Leo Messi. Y de la Champions. Vaya, que mala suerte.

Ahora, tiene valor el asunto, los mismos que en el 2010 pelearon, empujaron, insistieron, auspiciaron, fomentaron, escribieron y hablaron que el Balón de Oro debía ser para uno de los campeones españoles del mundo, es decir, Iker Casillas, Andrés Iniesta o Xavi Hernández, por ser campeones (y, mira por donde, ganó Messi) ven, descubren, critican, vomitan, escriben y hablan que sería injusto que el Balón de Oro fuese para Thomas Müller, Mario Götze o, por supuesto, como no, el meta Manuel Neuer, precisamente campeones del mundo, en perjuicio, como no, de Cristiano Ronaldo. Todo el mundo sabe, también en Madrid, también en el Madrid, que el mejor futbolista del plantea es Leo Messi. Y todo el mundo intuye (aunque sería hora de que lo ganase un portero) que CR7 será, de nuevo, Balón de Oro. Por eso suena aún más estentórea ese notita del Madrid. Innecesaria.