Courtois marca las diferencias y el Atlético ya está en cuartos

El conjunto rojiblanco tiene un seguro en su portería. Ya fue decisivo en el  encuentro de ida en Mestalla con una insuperable actuación y hoy, en el segundo  duelo, sus oportunas intervenciones sostuvieron la clasificación del equipo  madrileño, que ya aguarda rival en la siguiente ronda del ganador del duelo  Athletic-Betis. Y eso que el Valencia desactivó por momentos al Atlético, que no fue ese  conjunto apabullante de cada inicio de partido, ese bloque que encuentra con  facilidad las vías hacia la portería contraria y que se siente tan fortalecido  en encuentros intensos, sin pausa, porque su adversario tuvo orden y cierta  soltura en medio campo.

De los 30 primeros segundos, con acercamiento atlético y valencianista en las  áreas contrarias, se pasó a un duelo anodino. No pasó prácticamente nada en toda  la primera parte. Mucha voluntad de ambos equipos, batalla en medio campo,  balones divididos y control repartido, primero el Valencia, luego el  Atlético... La velocidad de Bernat y Fede dirigía el ataque visitante, la pelea de Diego  Costa, vigilado en cada desmarque por sus defensores, incomodaba al Valencia,  pero las imprecisiones dejaban cada intención ofensiva en poco o nada, en unos  cuantos disparos lejanos, en el caso del conjunto 'che' y en alguna arrancada  rojiblanca.

Ni siquiera el interesante debut del argentino José Sosa alteró el ritmo del  partido camino del descanso. Demostró detalles de buen futbolista. Maniobra bien  con el balón y en el regate, cuenta con visión de juego, siempre está preparado  para lanzar el pase decisivo e intervino en casi todo lo que generó su equipo en  el primer acto. Le ofreció un pase a Arda Turan dentro del área, le dio otro a Diego Costa,  cuyo tiro se fue alto, y habilitó a Juanfran en la banda derecha para un envío  al área al que no llegó por milímetros Raúl García, las tres acciones en ataque  más relevantes del Atlético antes del intermedio, cerrado con una parada de  Courtois a Bernat.

No se intuía por ese momento un gol de nadie. Tampoco del Atlético, que marcó  en el comienzo del segundo tiempo. Ya avisó en un primer remate picado el  uruguayo Diego Godín, que al siguiente, justo en la jugada posterior, cabeceó el  1-0 en un saque de esquina al segundo palo que superó la estirada del portero  Vicente Guaita. Una concesión que no suele perdonar el Atlético, animado con la ventaja en el  marcador. Lo confirmó Raúl García, tras recibir un buen servicio de Sosa, con un  trallazo con la derecha al poste, pero aún insuficiente para apagar al Valencia,  que, como hace una semana, chocó con los reflejos de Courtois, una garantía para  los locales. Primero abajo, a remate de Postiga, y después arriba, con una estirada  fantástica a un amenazante disparo de Michel. El Valencia apretó. No lo quedaba  otra para creer en la clasificación. Pizzi incluyó en el duelo a Paco Alcácer y  Pablo Piatti, más artillería ofensiva para discutir la victoria atlética y  provocar la prórroga.

No lo consiguió. Ya no fue capaz de generar más inquietud en la zaga del  Atlético, más allá de unos cuantos centros laterales y la circulación en torno a  su área, ni de poner en duda el pase a los cuartos de final de Copa del Rey del  equipo rojiblanco, sentenciado con el 2-0 de cabeza de Raúl García a saque de  esquina de Gabi y con un incontestable protagonista en toda la eliminatoria:  Courtois.