Copa del Rey 1967-68

El Barça se lleva la Copa de 'la final de las botellas'

El FC Barcelona conquistó en 1968 otra Copa cinco años después de la anterior e impidió que el Real Madrid firmase el doblete ante su propio público, desatando una lamentable reacción sin precedentes

1968, La final de las Botellas

1968, La final de las Botellas / sport

Alfonso Callejas

El CF Barcelona -nombre que recibía durante la dictadura franquista- inició su andadura en la Copa del Generalísimo de la temporada 1967-68 una vez finalizada la campaña liguera que había conquistado el eterno rival. La primera piedra en el camino sería el Real Sporting de Segunda. El partido de ida supondría el último encuentro de Rexach antes de la final –gracias a un permiso especial- debido a la obligación de cumplir con el servicio militar. Una ‘manita’ en el Camp Nou (5-0) dejaría encarrilado el pase a octavos de final a pesar de que en la vuelta disputada en El Molinón (2-0) los asturianos darían el susto tras dos goles tempraneros. 

La falta de ambición que había condenado al Barcelona en El Molinón desaparecería en la ida de octavos en la que el Barça asaltó con éxito Atocha para batir a la Real Sociedad por 0-2 con goles de Rifé y Pereda. El conjunto donostiarra, con la mente puesta en la promoción para evitar el descenso a Segunda, no fue rival para un Barça que remató la eliminatoria a lo grande en el Camp Nou (6-1).

TRIUNFO AGÓNICO Y RECITAL DE SADURNÍ

Con los cuartos de final el nivel de exigencia se disparaba para los pupilos de Salvador Artigas. Ante un Camp Nou lleno con 90.000 espectadores, el Barça cimentó gran parte de sus opciones de clasificación con dos goles en las postrimerías del encuentro. Un ‘doblete’ de Oliveros en el 85 y el 90 permitió romper la igualdad reinante, batir al infranqueable Iríbar y dejar el marcador en un definitivo 3-1.

Y si Iríbar había brillado en el Camp Nou, en la vuelta era el turno de Sadurní. El meta azulgrana hizo honor a su nombre al convertirse en un auténtico ‘salvador’ que se ganó la ovación de la grada tras el pitido final por su exhibición bajo palos. El 0-0 final daba el pase a semifinales.

ELIMINATORIA DE VÉRTIGO CON EL ATLÉTICO

Barça y Atlético llegaban al cruce de ‘semis’ con la obligación de alcanzar la gran final para dar una alegría a su afición tras la decepción liguera. La ida disputada en el Manzanares permitió que el cuadro ‘colchonero’ cobrase ligera ventaja gracias al gol de Luis (1-0). Un resultado con el que el Barça se conformaría, confiado de resolver la eliminatoria en el Camp Nou.

El coliseo azulgrana empujaría a los suyos hacia la final en un partido que se complicaría mucho en los primeros minutos. Adelardo pondría por delante a los hombres de Miguel Gónzalez, obligando al Barça a ver puerta con urgencia. Sin embargo, los goles no llegarían hasta bien entrado el segundo tiempo. Fusté ponía el 1-1 de penalti en el 65 y cuatro minutos más tarde un cabezazo de Zaldúa suponía el 2-1. Con el tiempo cumplido llegaría otro gol agónico de Zaldúa que daría la celebradísima clasificación –invasión de campo incluida- a la final del Bernabéu.

LA TENSIÓN DE ‘LA FINAL DE LAS BOTELLAS’

El Barça, como pasaría décadas más tarde en el sonado ‘Centenariazo’ logrado por el Deportivo, rompería el guión establecido y dejaría al Madrid compuesto y sin Copa cuando los blancos se las prometían muy felices ante su público. Un prematuro y desafortunado autogol de Zunzunegui en los compases iniciales de partido y la soberbia actuación de Sadurní bajo palos bastaría para sorprender a los blancos con un triunfo que desató la ira de la grada, desencadenando lo que pasaría a conocerse popularmente como “la final de las botellas” por la gran cantidad de envases de cristal que cayeron sobre el césped.

El Barça se vengaba 32 años después de la derrota (2-1) sufrida en Mestalla ante los blancos y lo hacía ante la atenta mirada de Francisco Franco, que entregó la <strong>Copa</strong> que llevaba su nombre, y de un Bernabéu que no dejó que los pupilos de Salvador Artigas diesen la merecida vuelta de honor. La celebración, sin embargo, sería sonada en el vestuario y una vez aterrizados en el aeropuerto de El Prat.

LAS MEJORES IMÁGENES DE 'LA FINAL DE LAS BOTELLAS':