Especial Copa del Rey

Así llegaron Barça y Athletic a la final de la Copa del Rey

Culés y leones llegan a la final de Copa después de haber protagonizado una andadura impecable en la competición, en la que no han perdido ni un solo partido

Ricard López

Los dos 'reyes' del torneo, los dos equipos que lo han ganado más veces -25 el Barça, 23 el Athletic-, obtuvieron con todo merecimiento sus billetes hacia la gran cita del próximo 25 de mayo en el Calderón. Sus trayectorias no dejan lugar a dudas. Los catalanes ganaron seis de sus ocho encuentros y empataron sólo dos, mientras que los vascos estuvieron a punto de lograr el pleno de victorias: siete, por sólo un duelo en tablas.

L'Hospitalet, primera 'víctima' culé

El Barça, en cuyo camino se cruzaron dos auténticos 'huesos' como el Real Madrid y el Valencia, se estrenó con un fácil cruce ante L'Hospitalet, un rival de Segunda B, en dieciseisavos. La eliminatoria permitió a Pep Guardiola dosificar a su plantilla, y los canteranos que tuvieron la oportunidad de jugar cumplieron con creces. La ida acabó 0-1 gracias a un trallazo por la escuadra de Andrés Iniesta. Y en la vuelta, no hubo color: 9-0. Thiago, Cuenca y Tello -con dos goles cada uno-, Xavi, Iniesta y Pedro fueron los autores de los tantos.

La gripe de Messi, el enfado de Mendilíbar... y el KO de Fontàs

El siguiente escollo a superar, en octavos, fue ya de Primera: Osasuna. La eliminatoria quedó sentenciada en la ida, ya que el Barça venció 4-0 en el Camp Nou, con Cesc y Messi marcando a pares. Precisamente la participación de este último desató las quejas del técnico del conjunto navarro, José Luis Mendilíbar, pues horas antes se había anunciado que el argentino estaba descartado por gripe. El '10' se recuperó a tiempo y lo revolucionó todo entrando por Pedro en la última media hora. La vuelta fue un mero trámite: Alexis y Sergi Roberto hicieron inútil tras el descanso la diana inicial de Lekic. La nota negativa fue la grave lesión de rodilla del canterano Fontàs, que le hizo perderse el resto de temporada.

Recital en el Bernabéu... y pisotón de Pepe a Leo

El plato fuerte, con mayúsculas, llegó en cuartos. Nada menos que un Madrid-Barça. Y el nivel de intensidad y tensión estuvo a la altura de los duelos precedentes con José Mourinho en el banquillo. En la ida, en el Bernabéu, el Barça dio un auténtico recital (1-2) a pesar del tempranero tanto inicial de Cristiano Ronaldo, en el 10'. Los blancos se acharon atrás tras marcar en su primera ocasión y aguantaron milagrosamente el 1-0 hasta el descanso. Pero, en la reanudación, el Barça ya no hizo concesiones. Puyol, aprovechando un despiste defensivo en un saque de esquina (1-1, 48'), y Abidal, a pase de Messi (1-2, 76') remontaron con toda justicia. El duelo será recordado por siempre por el alevoso e intencionado pisotón en la mano de Pepe a Messi, una de las acciones más lamentables que se recuerdan sobre un terreno de juego.

El mal perder de Mourinho

En la vuelta, el Madrid hizo sufrir de lo lindo a los de Guardiola (2-2). El Barça se complicó la vida de mala manera después de irse al descanso con un 2-0 a favor gracias a dos tantos de Pedro (43') y Alves (45') al filo del descanso. Pero en la reanudación, los merengues se vinieron arriba y empataron en apenas tres minutos por mediación de Cristiano Ronaldo (68') y Benzema (71'). Los locales acabaron pidiendo la hora. Y, tras el partido, nueva polémica: Mourinho, haciendo gala de su mal perder, nula deportividad y sus pésimos modales, bajó al parking del Camp Nou para increpar al árbitro, Teixeira Vitienes. "Cómo te gusta joder a los profesionales. Ahora te irás a fumar un puro y te reirás, sinvergüenza", le espetó. Y nadie sancionó al luso. Lo nunca visto.

El Valencia, último escollo

El último escollo antes de la final fue el Valencia. A pesar de su mejor juego, el Barça sólo pudo empatar 1-1 en la ida -con goles de Jonas y Puyol. La vuelta fue relativamente plácida (2-0). Cesc dio tranquilidad al Camp Nou marcando el 1-0 al cuarto de hora. Diego Alves lo paró todo, y los ches estuvieron a punto de empatar en sus contadas contras. Pero casi al final, Xavi sentenció.

La arrolladora trayectoria del Athletic

Al igual que el Barça, el Athletic también debutó en la competición ante un rival de Segunda B: el Oviedo. Los de Bielsa hicieron lo justo: triunfo por la mínima en ambos duelos (0-1 en la ida, con gol de De Marcos, y 1-0 en la vuelta, de Ander Herrera). Misión cumplida y pase a la siguiente ronda.

Tampoco se lo puso fácil otro Segunda B, el Albacete, en octavos. Los manchegos aguantaron el 0-0 en el Carlos Belmonte, de manera que todo quedó pendiente para la vuelta, en San Mamés. En 'La Catedral', el Athletic no se apiadó: 4-0, con Susaeta, Ander, Toquero -de tacón- y San José de goleadores.

En cuartos hubo un reencuentro especial para la afición bilbaína. Los 'leones' se vieron las caras con el Mallorca de Joaquín Caparrós, su ex entrenador. Fernando Llorente y Muniain, ambos de cabeza, rubricaron un 2-0 que los baleares no pudieron remontar en la vuelta. El Athletic volvió a ganar en el Iberostar Estadi, gracias a una desafortunada diana de Ramis en propia meta, tras un fallo garrafal del meta Calatayud.

Y ya por último, los de Bielsa tuvieron que deshacerse del equipo revelación del torneo: el sorprendente Mirandés, de Segunda B, que se plantó en 'semis' tras apear al Espanyol. Esta vez no hubo sorpresas. Dos goles de Llorente lo dejaron todo sentenciado en Anduva (1-2). Y la vuelta fue un paseo: 6-2, con dos tantos más de Llorente, y el resto de Muniain, Susaeta, Aurtenetxe y César Caneda, en propia meta.