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Núria Gago: "Kubala, Moreno y Manchón me marcó"

Es pequeña y dulce, pero ello no enmascara una mujer segura y una actriz a la que persigue el éxito. Ha escrito ‘Cuando volvamos a casa’, una novela fresca y ágil y un retrato de la vida más cotidiana    

La actriz Núria Gago durante la entrevista para Sport

La actriz Núria Gago durante la entrevista para Sport / sport

Àngels Fabregues

La de actor es una vida insegura aunque no te va mal ¿Cómo lo llevas? 

Lo llevo con mucha alegría y muy agradecida porque trabajo en lo que me gusta. He tenido épocas de parón. Al principio me angustiaban y ahora las abrazo. No me gustan pero forman parte de mi profesión, con lo cual lo respiro con tranquilidad e intento aprovechar el tiempo haciendo cosas que me gusten.

¿Qué tiene Núria Gago?

Mucha curiosidad, muchas ganas de hacer cosas y de controlar los miedos que todavía quedan.

¿Qué miedos quedan?

Muchas veces tenemos ciertas inseguridades o incertidumbres que nos hacen ser menos libres, menos espontáneos. Tal vez hay que perder los miedos, vivir como si no hubiera la opción del fracaso. Si después existe no pasa nada. Se asume y se supera.

Eres tímida como otros muchos actores. Suena raro. 

Cuando actúas no estás diciendo lo que tú piensas. Puede ser que compartas lo que dice tu personaje pero de entrada no es tu pensamiento. Estás dejando tu cuerpo y tu voz a las ideas de otro. El acto más profundo es cuando uno abre el corazón y explica como se siente, como vive o como late, y aquí es donde entra mi timidez. También existe la típica sensación de sentirse observado que a veces es algo incómoda. Uno aprende a convivir con ello, pero genera cierta timidez.

¿Cine y televisión te han atrapado?

El audiovisual me encanta. El cine y la televisión me fascinan.

La cámara te quiere.

Yo la quiero a ella. Espero que ella me quiera a mí. 

¿Dónde te sientes más cómoda? 

Cuando elijo un proyecto no tengo en cuenta si es cine, televisión o teatro sino la historia. Prefiero hacer una función de teatro preciosa a una serie de TV sin sentido, una serie preciosa a una película sin sentido y una película preciosa a una función sin sentido. Creo que nosotros somos cuentacuentos y es importante elegir bien qué historia explicamos. 

De pequeña ya tenías vocación de actriz. ¿Te imaginabas tanto éxito?

Ni en el mejor de los sueños. Era un impulso imparable en mí querer ser actriz, pero sabía que si no ocurría me buscaría las castañas de otra manera.  

¿La serie ‘Kubala, Moreno y Manchón’ marcó tu carrera?

Fue increíble formar parte de ese proyecto. Fui muy afortunada, feliz… creo que es una de las series de las que me siento más orgullosa. 

En la serie eras Manchón. ¿Sabes quién era Eduardo Manchón?

No (risas). Me explicaron que era un jugador del Barça pero no le pongo cara. Es un delito, lo sé.

Era un jugador del Barça de los años 50 y era pequeño…

Como yo

Rápido.

Como yo

Y muy buen rematador.

Esto ya no lo sé. Cuando me meten caña tal vez yo sea más de las que me retiro y digo ‘bueno, hasta luego’. No soy vengativa. Para mí no hace falta perder el tiempo con alguien que pierde energía en hacerte algo malo. Simplemente me alejo. 

Manchón formó parte de un equipo que hizo historia. ¿Te gustaría formar parte de la historia del teatro? 

Sería bonito que me recordaran como alguien que formó parte de proyectos bonitos y conmovedores. 

¿Cómo surgió la idea de escribir ‘Cuando volvamos a casa’?

Yo escribía para mí en épocas de parón para estar activa, por una necesidad instintiva de creación. Pero nunca la intención era publicar. Era una cosa que hacía como distracción para mi cabeza y mi corazón. Unos amigos me animaron a moverlo. Pensé que no perdía nada por intentarlo.

¿En algún momento tuviste miedo de que te publicaran?

El miedo máximo fue cuando me dijeron: ‘Sales y sales con Planeta’. Allí entré en crisis. Volví a leerme el libro. Me vino el miedo escénico… pero ahora estoy muy feliz de que me haya pasado todo esto.