Manolo Lama: "No creo en el periodismo de bufanda"

Manolo Lama emplea al otro lado del teléfono la misma jerga campechana que lo hace reconocible en la radio. Es intenso, directo y controla el medio: dice solo lo que quiere decir (y cómo lo quiere decir).

Pedrerol ha dicho en más de una ocasión que el compañerismo es una milonga en la profesión.

¿Comparte esa visión del periodismo? 

Yo me siento, primero periodista. No, primero compañero y luego periodista. Para mí es fundamental trabajar en un clima de buen rollo, con química, para que los productos salgan adelante. No le he deseado nunca mal a ningún compañero. El objetivo en mi vida no es ganar al otro, sino hacerlo bien yo. 

¿Con qué recuerdo se queda de la experiencia de Los Manolos?

Me quedo con un recuerdo maravilloso. Yo creo que hicimos una nueva televisión. Guste o no. Los Manolos han creado un nuevo estilo y durante diez años la audiencia nos ha respaldado.

¿Ha cambiado algo su relación con Manu Carreño? 

Los Manolos no lo rompieron ni Manu Carreño ni Manolo Lama. Lo rompieron los ejecutivos de Mediaset que tomaron la decisión de que yo no debía seguir. Pero a Manu Carreño no hay que señalarle ni culparlo, porque yo he tenido, y sigo teniendo con él, una grandísima relación. Fue una decisión de Mediaset y las audiencias han demostrado que se equivocaron con la decisión.

Pero usted dijo recientemente que nos se hablaban…

¿Yo? No, eso es otra perola mental. Yo fui a un casino de Madrid, donde se daba un premio. Y salí arriba con él, acojonados de risa lo dos, y dije: ‘Aquí está Manu Carreño, con el que dicen que no hablo, y estamos en la misma mesa’. Lo que pasa es que no sé qué medio lo interpretó como una hostia a Manu, cuando estábamos sentados él con su chavala y yo con la mía. Es más, ayer me mandó un mensaje vacilándome con el nuevo programa. 

¿Qué le parece que el periodismo deportivo esté cogiendo cada vez más elementos de los programas del corazón?

Bueno, yo es que creo que hay dos tipos de programas de periodismo deportivo. El periodismo deportivo de mediodía, que es fresco, visual, muy de ver. Y luego el de la noche, que es muy tertuliano. Muy de radio. Ya no es la imagen: la base es el espectáculo, el show, el pique, la tertulia, la opinión. Luego la grandeza que tiene esto es que puedes ver lo que te dé la gana. 

¿Se sientes cómodo en el periodismo del show?

Ni me siento cómodo ni me siento incómodo. Respeto mucho a compañeros míos que se basan en ese periodismo de bufanda, pero no creo en él. Pero no porque no pueda triunfar; no creo en él porque sinceramente yo no me creo que todo lo que haga el Barça o el Madrid esté bien. Y como yo no me lo creo, no participo de eso. No me veo de periodista de bufanda.

¿Si le preguntara a gente de su entorno cercano de qué equipo es Manolo Lama, qué me dirían?

Pues mira, unos te dirían que soy del Madrid, otros del Atleti, otros que soy antimadridista, otros que soy culé. 

Eso me lo diría un aficionado medio, pero no su entorno más cercano…

No, si fueras a los que están muy allegados a mí, te dirían que a este le da igual. Que este hace periodismo y le da lo mismo criticar a Florentino que criticar a Bartomeu. 

Pero la cuestión aquí no es el nivel de crítica; es decir, todos podemos hacer un periodismo honesto pero eso no quita que seamos de un equipo.

No sufro ni cuando ganan ni cuando pierden ninguno de los 20 equipos de Primera. Llevo muchos años en esto y lo único que ya me pone es ver jugar a mi hijo al fútbol, que me enamora, e intentar que el Córdoba no baje.

¿Eso se lo cree usted?

Bueno me lo creo yo... aunque tú creas que yo soy madridista.

Yo solo le digo que cualquier aficionado al fútbol es de un equipo; es más difícil cambiar de equipo que de pareja…

Ya pero a lo mejor tú todavía eres muy joven. Igual cuando pasen los años te vas a dar cuenta de que te dan igual los colores. Yo estoy convencido de que tú crees que soy del Madrid. Pero si le preguntas a Florentino Pérez te dirá que soy antimadridista, que es algo que ha dicho públicamente. Yo voy al campo del Madrid y me llaman colchonero. Voy al Calderón y me llaman vikingo. Conclusión: lo estaré haciendo bien. 

¿Entonces no es partidario de que el periodista deportivo diga de qué equipo es? 

Me parece bien si luego, cuando ejerce la crítica, se olvida de qué equipo es.

¿Usted puede ser ecuánime con un personaje como Florentino cuando sabe que lo ha intentado aparcar?

Yo creo que el periodista no debe temer a nada ni a nadie. El periodista lo que tiene que hacer es decir la verdad. No insultar. No mentir. Intentar no faltar al respeto. Pero no vivir arrodillado. Yo creo que, para un periodista, es mejor morir de pie que vivir arrodillado. Yo siempre voy a ejercer mi libertad; voy a opinar lo que yo quiera me cueste lo que cueste. Guste más o menos. En eso no voy a cambiar.