Jordi Basté: "Piqué es la Santísima Trinidad del Barça"

Vive la vida al revés. Cuando la gente vuelve de fiesta, él se pone delante de un micro. No es extraño, pues, que sufra los estragos del insomne. Un sufrimiento al que hay que sumar una hipocondría latente. Cuando llega lo primero que dice es que está extraordinariamente cansado, pero cuando arranca a hablar lo hace con un ritmo y una energía vertiginosa. 

Sergi Pàmies siempre dice que es un culé defectuoso porque no se siente antimadridista. ¿Cómo te definirías tú?

Mira, a mí me pasó una cosa el año pasado, que perdí una apuesta y fui a la final de la Champions, Madrid-Atlético. Y me tocó en medio del Frente Atlético. Ahí me di cuenta de que la relación, entre comillas, de amistad con el Atlético era extraordinariamente postiza, porque nos unen más cosas con el Madrid que con el Atlético.

¿Ah sí? 

Sí, en el fútbol nos unen más cosas con el Madrid. Es decir, qué manera de jugar te gusta más: ¿la que juega el Madrid o la que juega el Atlético? Históricamente, si abandonamos la época Mourinho, la unión futbolística con el Madrid es más natural. Pero, ¿qué nos une con el Atlético? Pues precisamente la visceralidad en contra del Madrid. Pero es eso, y la política y lo que significa Madrid. El problema del Madrid no es futbolístico. Mi problema con el Madrid es mediático. Lo que ocurre después de la victoria.

¿Si tuvieras que definir tu relación actual con el Barça, dirías que estás en la fase del enamoramiento, de la segunda residencia o del desencanto?

[Suelta una carcajada]. Estoy en la fase de hace 50 años que tengo la misma pareja y nos aguantamos. Hay mucho amor. Somos felices y de vez en cuando incluso tenemos sexo.

¿El Barça es aún más que un club? 

[Se lo piensa] Bueno, no sé si los clubs son ahora más clubs que antes, ¿no?, pero el Barça siempre será distinto. Por muchas cosas. 

¿El club mantendría el mismo rol dentro de lo que es el país si Catalunya fuera un estado independiente?

Es una buena pregunta. Yo creo que durante los primeros años el Barça sería el mejor embajador que tendría Catalunya para explicar lo que es. Porque muchos nos pensamos que en Europa se preguntan qué es Catalunya, pero mucha gente solo sabe ponerla en el mapa y conocen Barcelona. 

¿El Barça de Luis Enrique juega a otra cosa? 

El Barça de Luis Enrique yo creo que es un Barça potente. Y el Barça de Guardiola era fantástico, pero yo creo que se ha sido muy injusto con Luis Enrique. Lo pienso. Él es como es, pero como futbolista también era una persona muy agria. Y no se ha abierto porque no le interesa, porque no le cae bien la prensa. Pero yo creo que él ha hecho el trabajo que tenía que hacer y los resultados le avalan. 

A Guardiola lo conoces muy bien. ¿Crees que está disfrutando en el City? 

Creo que se lo está pasando mejor de lo que la gente se cree. Mira, Pep Guardiola es un obsesivo; es un workaholic, vive para el trabajo. Y tengo clarísimo que pasará a la historia. 

¿Crees que volverá al Barça?

Hoy no lo veo así, pero después la bestia es muy extraña y muy introvertida. Y nunca se sabe, pero si me haces apostar, apostaría que no vuelve. 

¿Te imaginas a Piqué de presidente? 

Hace dos años te habría dicho que no. Hace un año pensaba que me estaba vacilando. Hace seis meses pensaba que me levantaba la camisa. Y ahora empiezo a ver que sí. Que se le pasa por la cabeza segurísimo. Que lo haga, eso ya lo veremos. 

¿Qué papel crees que tiene ahora en el Barça?

Es el personaje más internacional que tiene el Barça. Ni Messi, ni Neymar. Es un tío que piensa de una forma global. Un tío joven, abierto al mundo, con la pareja que tiene, los idiomas que habla, con una capacidad de trabajo y aprendizaje descomunal. Y además creo que lo haría muy bien. Eso sí, debería tener un jefe de prensa, un jefe de comunicación y un portavoz tan buenos como él. Él no debería hablar mucho [risas].

¿Y por qué crees que con todas estas virtudes sus compañeros no lo eligen capitán? 

Probablemente por un tema de miedo. Y porque seguramente muchos lo ven frívolo. Es probable. Y porque muchas veces la gente se mueve más con la imagen externa. Para un vestuario es más cómodo tener a un Iniesta que a un Piqué de capitán. Pero yo creo que Gerard se ha convertido en la Santísima Trinidad del Barça; es el presidente, el entrenador y el capitán sin ser ninguna de las tres cosas. 

¿Qué te dice la nariz sobre el próximo entrenador del Barça? 

No tengo ninguna información. Yo no se lo recomendaría a Valverde. Quizás sí que será Unzué. Yo no me lo quería creer, pero que él se pone bien, Luis Enrique lo señala un poco como su heredero y hay veces que vas a buscar fuera lo que ya tienes en casa. Y conociendo a esta directiva, que es una directiva conservadora, la opción más conservadora es Unzué.