LIGA BBVA 2015/16: FC BARCELONA - REAL MADRID
Piqué, una de las pocas cosas positivas del clásico
El defensa azulgrana abrió el marcador y jugó a un gran nivel
TONI FRIEROS
Con permiso de Busquets, que estuvo inconmensurable, Gerard Piqué volvió a protagonizar un excelente partido y, nuevamente, contra el Real Madrid, rival que, como está demostrado, le motiva especialmente. El defensa le dio a la zaga azulgrana esa seguridad y personalidad que siempre es necesaria cuando en frente hay jugadores de la talla de Benzema, Cristiano Ronaldo y Bale. Verdaderamente no pudo hacer nada para evitar los goles del Real Madrid. En el primero, un rebote le impidió despejar de cabeza y en el segundo estaba bajo los palos de su portería.
Piqué defendió con seguridad y personalidad todos los balones aéreos en los que tuvo que intervenir y salió al cruce con solvencia. Y cuando le tocó salir con el balón controlado y empezar a construir el juego, lo hizo sin complicarse la vida.
Sin duda, su mejor aportación al partido se produjo a los cincuenta y cinco minutos. Un saque de esquina a favor, ejecutado por Rakitic, lo remató soberbiamente adelantándose a Pepe, que le perdió de vista dentro del área. Un salto medido y un remate perfecto, de arriba a abajo, ante el que no pudo hacer nada Keylor Navas.
El hecho de que ese gol no acabara sirviendo para el triunfo azulgrana no resta méritos a la actuación de Piqué, uno de los pocos jugadores del Barça que estuvieron a la altura en el clásico.
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