Luis Enrique en el Madrid: solo tres triunfos y un gol en once clásicos

Javier Giraldo

Javier Giraldo

El actual entrenador del Barça, Luis Enrique Martínez, fue un clásico de los clásicos en la década de los noventa y en los primeros años del siglo XXI: tras su fichaje por el Real Madrid en el verano de 1991, procedente del Sporting de Gijón, el asturiano fue un habitual de los partidos entre Barça y Madrid: primero con la camiseta blanca y después, con la blaugrana.

El bagaje de Luis Enrique como jugador del Real Madrid (1991-1996) en los clásico no fue demasiado favorable, ya que de los once clásicos que jugó con la camiseta blanca, solo pudo ganar tres: dos en la Liga (temporada 1992-93 y el 5-0 de la temporada 1994-95) y uno en la Supercopa de España (3-1, en el arranque del curso 1993-94).

EL DEBUT EN EL CLÁSICO

Luis Enrique debutó en un clásico en la temporada 1991-92, concretamente el 19 de octubre de 1991 en el Santiago Bernabéu, con un empate entre Madrid y Barça. Sustituyó a Hagi y solo disputó 15 minutos. Esa misma temporada, también jugó el partido de vuelta, que acabó en tablas (1-1), aunque su presencia fue testimonial: entró al Camp Nou en el último minuto del partido para suplir a Butragueño.

En su segunda temporada en el Madrid (92-93), Luis Enrique, flamante campeón olímpico, tampoco logró jugar un clásico como titular: disputó los dos partidos de Liga ante el Barça, la derrota en el Camp Nou en la primera jornada (2-1) y la victoria por 2-1 en el Bernabéu. En el primero, jugó 74 minutos, tras suplir a Chendo en el lateral diestro; en el de vuelta jugó media hora al entrar al campo en lugar de Butragueño.

En la temporada 93-94, Luis Enrique jugó tres clásicos ante el Barça: dos en la Supercopa de España que acabaría ganando el Madrid, el 3-1 del Bernabéu y el 1-1 del Camp Nou. Curiosamente, aquella Supercopa no se disputó en agosto, sino a mediados de diciembre.

En la Liga, Luis Enrique solo jugó el clásico del Camp Nou, resuelto con el famoso 5-0 de la cola de vaca de Romario: el entrenador del Barça jugó completo aquel partido. En el clásico de vuelta (0-1, gol de Guillermo Amor), Luis Enrique ni siquiera jugó.

Pudo tomarse la revancha un año después, cuando participó en el 5-0 que el Madrid de Valdano le endosó al Barça de Cruyff en enero de 1995. Luis Enrique marcó el cuarto gol del Madrid aquella noche. Fue su único gol ante el Barça como madridista. También fue su última victoria en un clásico.

En su última temporada en el Madrid, Luis Enrique jugó los dos clásicos ligueros: 1-1 en el Bernabéu y 3-0 en el Camp Nou, con dos goles de Kodro y uno de Figo, en el que fue su último Barça-Madrid como jugador blanco: fue el 10 de febrero de 1996. Tres meses después, a finales de mayo, firmaría como jugador del Barça.