Wouter Poels, con el maillot histórico de la recuperada Vuelta a Valencia

La Vuelta a la Comunidad Valenciana ha comenzado a rodar con la victoria de un escalador sobre un campeón del mundo de contrarreloj. Todo un contrasentido puesto que Poels, capaz de terminar segundo en la ascensión del Angliru, en la Vuelta a España 2011, capaz también de ganarles la etapa reina del Tour de l'Ain'2010 a Moncoutie y Pinot, superó a Vasili Kiryenka por 21"  en la contrarreloj individual de 16,6 Km ante la sorpresa general incluso en su propio equipo, Sky 

El corredor que estuvo más cerca de Poels fue el veterano Luis León Sánchez. El de Astana y Kiryenka partían como principales favoritos, pero se quedaron con la miel en los labios. Jon Izaguirre, de Movistar Team, salió con la idea de conseguir el primer maillot de una carrera resucitada por los hermanos Casero después de 8 años 'desaparecida' por la crisis económica. El vasco quería ese maillot 'histórico' y fue a por él. Le puso tanto empeño que a los 5 km. entró demasiado fuerte en una curva y le resbaló la lenticular trasera. Se golpeó contra el quitamiedos. Tras recuperarse intentó seguir, pero la bici estaba averiada y tuvo que cambiarla. Perdió más de un minuto con el contratiempo y aún así cruzó la meta a 37" del ganador.   

El italiano Fabio Aru y Joaquim Rodríguez se estrenaban en la Vuelta a Valencia. Ni uno ni otro, muy lejos de su forma física, consiguieron destacar. El último ganador de la Vuelta a España necesitó 1'01" más que el ganador, mientras que el de Parets del Vallés acabó en 1'31. Ambos, como Tom Boonen (a 1'26"), sabían que no tenían la menor opción 

Poels, primer líder en Valencia, recoge la suerte que le ha sido negada durante muchos años. El holandés de Astana vio seriamente comprometida su carrera profesional al verse envuelto en una dramática caída en la sexta etapa del Tour del 2012. Entre los corredores lo recuerdan como 'la masacre de Metz' puesto que casi un centenar de ciclistas resultaron implicados. La peor parte se la llevó el holandés, que se fracturó tres costillas, la estalló el bazo y sufrió laceraciones en un riñón y un pulmón. Y aún así, el chico intentó seguir desafiando el dolor durante un par de kilómetros. Poels necesitó 223 días, siete meses, para recuperarse por completo de aquel desastre.  

La segunda etapa llevará a la Vuelta a la Comunidad Valenciana a un escenario ciclista inédito. De Castellón a Fredes, 163,3 Km. con llegada a un puerto de primera, largo pero más suave que Catí.