Vuelta a España

El alemán Degenkolb gana la cuarta etapa de la Vuelta

El alemán John Degenkolb ganó hoy al sprint la cuarta etapa de la Vuelta a España de ciclismo, que terminó en la ciudad de Córdoba después de 164 kilómetros

Degenkolb, celebrando su llegada a meta

Degenkolb, celebrando su llegada a meta / sport

DPA / EFE

Degenkolb, de 25 años, celebró su primer triunfo en España después de las cinco victorias que logró en la edición de 2012.

"Ayer no pude lograr la victoria y estaba muy decepcionado. Hoy la historia fue mejor. Me siento inmenso", dijo el alemán en la línea de meta tras una calurosa jornada en la que los termómetros registraron hasta 40 grados a la sombra.

El australiano Michael Matthews continuó como líder de la clasificación general con ocho segundos de ventaja sobre el colombiano Nairo Quintana, el gran favorito al triunfo final.

Tercero a quince segundos del líder es el español Alejandro Valverde, que atacó en el descenso de un puerto de segunda categoría con la intención de arrebatar el maillot rojo a Matthews.

Sin embargo, Valverde, campeón de la Vuelta 2009, no pudo aguantar los 30 segundos de ventaja que llegó a disfrutar.Mañana se disputará la quinta etapa, también de perfil llano, de 180 kilómetros entre las localidades de Priego de Córdoba y Ronda.

Una etapa abrasadora

Degenkolb, de 25 años, otra perla de la escuela alemana de velocistas, aprovechó una de las pocas opciones que tendrá este año. Era su día, lo tenía marcado y apareció como un rayo en la recta de meta para superar con autoridad al español Vicente Reynes (Iam) y al líder, que además rebañó 4 segundos de bonificación.

Un desenlace previsible, pues nada relevante sucedió en el único aliciente antes de meta, el Alto del Catorce por Ciento, a 25 kilómetros de meta, donde Valverde se lanzó en un viaje sin convicción, "a ninguna parte", que fue reducido por el esfuerzo común de todos sus rivales y respectivos equipos. Demasiado para el murciano.

Un día más que salvaron los jerarcas de la Vuelta. Quintana vive tranquilo segundo en la general, esperando las cumbres; Valverde es tercero, ileso de la caída cerca de Arcos, Contador se va recuperando de sus molestias en la rodilla y gana tiempo con el paso de los días, "Purito" espera sus muros, y Froome habla poco y luce una incógnita imposible de descifrar. Todos en apenas medio minuto.

Cuatro corredores se animaron a salir del pelotón por la comarca de Los Alcores, en un desafío al horno asfaltado. Ahí estaba el fugitivo habitual Javier Aramendía, navarro del Caja Rural, el estonio Joeaar, y los franceses Turgot y Engoulvent.

Una aventura que marcó unas horas el paso del pelotón, de nuevo gobernado por el Orica del líder Michael Matthews, que no quería despedirse del maillot rojo. Y lo defendió con uñas y días, por eso la fuga se anuló en la primera tachuela, el Alto de San Jerónimo, a tiro de piedra del primer paso por Córdoba.

Algunos se pusieron flamencos, como Amets Txurruka, quien coronó en cabeza y se lanzó acompañado por Engoulvent en busca de la gloria, pero no pudo hacer honor a su nombre ("sueño" en euskera). 

Ambos pasaron por meta con un puñado de segundos sobre la marabunta. Pero no era el final, no, quedaba el Alto del Catorce por Ciento, nombre a medida de este deporte, a 25 de meta. Allí tensó el Movistar para romper en dos el pelotón, y para mover una de sus piezas de lujo. Valverde hizo de Nibali y atacó en el descenso.

En la misma bajada la armó en 2011 el Liquigas de Nibali y Sagan, con triunfo del segundo. Valverde no desciende como el ganador del Tour, ni llevaba tres compañeros de equipo, pero "El Bala" lo intentó. Eso sí, para nada. "Sabía que no tenía nada que hacer", dijo.

Los que tenían que aparecer aparecieron. La victoria era cosa de gente rápida. Nada más pasar el Puente Romano que atraviesa el Guadalquivir, con esas vistas de la ciudad presidida por la Mezquita-Catedral, el grupo se volvió loco. Degenkolb, ganador de la clásica Gante Wevelgem, se llevó el gato al agua.