Champions League

El PSG, del susto a la victoria en Bulgaria

El PSG se impuso a domicilio al Ludogorets, que se había adelantado en el marcador

Josep Coves

A balón parado se adelantó el Ludogorets contra el PSG y a balón parado se rindió el campeón búlgaro en Sofía, su destierro, a 280 kilómetros de Razgrad porque su pequeño estadio no cumple con las normas de la UEFA. Marcó el brasileño Natanael con un libre directo el primer gol de la noche y Moti falló un penalti en la segunda mitad que pudo suponer el 2-2.

Pero solo un minuto después de que Aurier rechazara la pena máxima lanzada por el jugador rumano, Cavani firmaba la sentencia al anotar su segundo gol y colocaba en el marcador el1-3 que fue definitivo parala suerte del partido.

Sin embargo, la noche no comenzó nada bien para el campeón francés. Cuando Natanael marcó el primer gol se activaron las alarmas en el PSG. El mal arranque de temporada y la última derrota en Toulouse cinco días antes volvían a poner al descubierto el proyecto de Unai Emery, a remolque de un don nadie que se estrena esta temporada en la Champions.

El Ludogorets quiso disfrutar de la fiesta de la máxima competición continental y su ilusión le permitió tratar al todopoderoso PSG de tú a tú durante algunos minutos. Los que tardó el equipo de Emery en zanjar el asunto a partir del dominio del balón.

Con Verratti Di María muy vivos, los visitantes se hicieron con el control de la situación y pasaron a jugar en el campo del Ludogorets. De su insistencia llegó el gol del empate, de Matuidi, que recibió un balón de Verratti dentro del área.

No fue hasta la segunda mitad cuando el PSG logró sacar adelante el partido. Un cabezazo de Cavani, a centro de Di María, le puso por delante en el minuto 56 y tuvo la fortuna de que tres minutos después Moti fallara el penalti.

En ocasiones el fútbol es cruel y casi siempre lo es con los pequeños. Así se entiende que de un posible empate se pasara acto seguido al 1-3 con el segundo gol de Cavani, esta vez a centro de Lucas. El uruguayo acertó a meter el pie entre dos defensas locales para sentenciar el partido. 

Tuvo el PSG más ocasiones para ampliar su ventaja, pero la falta de acierto en los remates, en especial de Matuidi, impidió al conjunto de Emery engordar el marcador.