CHAMPIONS LEAGUE

Entre el gas pimienta y las estelades

Las 30.000 enseñas independentistas vistas en el Camp Nou tuvieron más eco en la UEFA que el ataque con gas pimienta de los ultras del Legia en Varsovia

Jordi Blanco

Entre el gas pimienta con que se quiso atacar a los aficionados del Borussia Dortmund en las gradas del estadio Polish Army de Varsovia y la presencia de 30.000 estelades en el Camp Nou, la UEFA se apresuró a tomar buena nota del peligro que supuso lo ocurrido... En Barcelona.

Mientras el Barça arrastra una multa de 150.000 euros desde el mes de junio por exhibir enseñas independentistas durante los partidos de Champions League, en un asunto que comenzó con la disputa de la final de Berlín en 2015, lo sucedido durante el Legia-Borussia Dortmund en Polonia puso de manifiesto las diferentes formas de medir existentes en el fútbol profesional.

La UEFA tomó nota de las estelades en el Camp Nou... Y no se manifestó oficialmente por lo sucedido en Varsovia

Si los jugadores del Borussia Dortmund sufrieron un ambiente inesperado y exageradamente hostil en Varsovia, peor les fue a los aficionados alemanes presentes en el estadio, quienes minutos después de que Marc Bartra anotase el 0-3 se vieron sorprendidos por el ataque de un grupo de encapuchados que rociaron con gas pimienta, a policías que les protegían provocando una alarmante desbandada... Y el aplauso de buena parte de la hinchada que presenciaba el encuentro.

Un día después de que los ultras del PSV atacasen con petardos durante la madrugada el hotel del <strong>Atlético de Madrid</strong> en Eindhoven y cuando aún se esperan sanciones por los graves incidentes sucedidos durante la Eurocopa de Francia, la locura desatada en Varsovia no mereció ningún tipo de manifiesto oficial por parte de la UEFA, desde donde, en cambio, volvió a tomarse nota de lo sucedido en el Camp Nou.

El nuevo presidente del organismo continental, declarado madridista, tiene la oportunidad de cambiar, como prometió, las cosas

El estreno de la Champions League coincidió con la elección del nuevo presidente de la UEFA, el esloveno Aleksander Ceferin, quien no escondiendo su filiación futbolística, prometió un profundo cambio en el ente continental. Quizá las imagenes del martes en el Camp Nou y del miércoles en Varsovia deberían provocar una primera reacción...